Mishelle Camacho Tacuri tenía 28 años y era la hija única de Margarita Tacuri, una maestra jubilada y muy conocida en la parroquia La Unión, en el cantón Quinindé (Esmeraldas). Su sueño, desde muy joven, fue tener una familia y ver crecer a su hijo, que ahora tiene 5 años.

Pero fue su mismo esposo Niomar Darío Intriago Laborde, de 30 años y cabo segundo de la Policía en servicio activo, quien apagó esas ilusiones por completo tras asesinar a la joven mujer y luego suicidarse. 

El hecho se registró en la madrugada de este domingo 16 de octubre, a las 04:20 aproximadamente, en el departamento que alquilaba la pareja en el segundo piso de una casa en el barrio Los Girasoles. En este lugar vivían desde hace un año.

Según la versión de vecinos, a esa hora de la madrugada se escuchó una acalorada discusión entre la pareja, la cual horas antes había estado ‘vacilando’ supuestamente en un bar de la localidad.

Los dueños del inmueble corroboraron aquello y agregaron que la discusión duró 20 minutos. “Cuando escuchamos detonaciones llamamos inmediatamente a la Policía. Sabíamos que las cosas no andaban bien, porque se escuchaba mucho ruido. Cuando nos asomamos a la ventana escuchaba que la vecina pedía que no la dejaran morir”, aseguró el dueño de la casa, quien pidió no ser identificado.

Mishell no murió inmediatamente, pese a la grave herida que tenía en la espalda. Tuvo tiempo y fuerzas para salir con su hijo del departamento, llegar a la primera planta y avisar que su esposo le disparó y luego se suicidó.

La mujer fue trasladada al hospital Padre Alberto Buffoni, de Quinindé, donde poco pudieron hacer y dispusieron su traslado a Santo Domingo de los Tsáchilas, pero no resistió por la gravedad de la herida y falleció en el trayecto.

Preliminarmente se conoce que Laborde prestaba servicios en el cantón Eloy Alfaro (Esmeraldas) y se encontraba disfrutando de sus días de descanso. Para asesinar a su esposa y luego quitarse la vida habría utilizado su arma de dotación, la misma que la institución le dio para servir y proteger a la ciudadanía.

“Estamos en cuestiones investigativas. Desconocemos las causas de este lamentable evento. Hemos hecho una fijación de la escena del crimen que está en un departamento ubicado en la segunda planta de una casa”, aseguró el teniente coronel Marco Antonio Salazar, jefe del Distrito de la Policía de Quinindé.

Una fuente cercana a la pareja dijo que supuestamente la discusión empezó por celos del policía hacia su esposa. Además, mencionaron que la mujer era víctima de maltratos psicológicos y físicos por parte de su esposo.  Los cuerpos fueron llevados al Centro Forense de Esmeraldas.