La falta de pruebas y porque aún tiene un proyectil alojado cerca de su ojo fueron los argumentos por los que la madrugada de ayer, en la audiencia de formulación de cargos, por delincuencia organizada, se le otorgó medidas cautelares de arresto domiciliario a José Arturo Rivas Lozano, detenido el miércoles, luego de que la Policía realizará 35 allanamientos en Guayaquil y Santa Elena.

El fiscal Jhon Campuzano, de la Unidad Nacional de Investigación de Delincuencia Organizada Transnacional (Unidot), reveló a EXTRA que Joselo, alias con el cual es conocido Rivas, de 41 años, es investigado, porque, presuntamente, lidera una de las células de la organización criminal Los Lagartos.

“Junto a él fueron detenidos su esposa y su hijo, pero a ellos no se les formuló cargos y se los dejó en libertad. A Rivas se le dio arresto domiciliario, porque en los expedientes no había justificación que sea el líder de la banda y porque está convaleciendo del atentado que sufrió en junio pasado. También se dispuso el uso del grillete electrónico y la vigilancia constante de un policía”, dijo el funcionario.

Explicó que en total fueron detenidas 14 personas y que seis de ellas pertenecerían a la célula de Los Lagartos que, al parecer, lidera Rivas, cinco a otro grupo de la misma banda criminal, y tres en flagrancia porque en su poder se encontraron armas de fuego.

El pasado 7 de junio Rivas, quien tiene procesos judiciales por robo, delincuencia organizada, asociación ilícita, tráfico de armas, fue atacado a tiros, cuando juntos a su esposa se movilizaban en su vehículo por una plaza comercial de la vía a Salitre. Recibió 5 tiros. (AEB)