Entre 1994 y 1999, los canales UHF marcaron una revolución en la televisión ecuatoriana con programas frescos y adaptados a los intereses de una generación fascinada por la tecnología y los videojuegos. En estos espacios, menores de veinte años, con conocimientos básicos de internet y juegos, se convirtieron en guías para el público adolescente.

La música también encontró su lugar en este auge. En 1993, MTV Latino se empezó a emitir en Ecuador con los éxitos del momento. Televisión Satelital, actualmente fuera del aire, le apostó a ese nicho y contrató a un joven de apenas 18 años, para que hiciera las veces de VJ (video jockey, un artista que crea y presenta videos).

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Ese chico era Víctor Mamán Viera, mejor conocido como Vicman, un seudónimo que fusionaba su nombre y apellido. A tan corta edad, ya acumulaba experiencia en canales desaparecidos como SucreTV y Mundo Canal.

Todo una aventura televisiva

Han pasado más de 20 años de esa aventura televisiva y el paso del tiempo ha dejado a Vicman irreconocible. Atrás quedó el joven de pelo corto y gafas oscuras. Ahora luce más delgado, con el cabello largo hasta los hombros y una barba tipo candado.

Punk, grunge, rock, pop y otros géneros se convirtieron en el sello de su programa El show de Vicman. Sin embargo, algo permanece intacto: su siempre criticado acento argentino.

Su particular forma de hablar se debe a una mezcla de raíces: uruguaya y judía sefardí por parte de su padre, y ecuatoriana por el lado materno. Durante su adolescencia vivió en Uruguay, donde adquirió su característico tono y, además, el hábito de beber mate. “Soy guayaquileño y más ecuatoriano que el encebollado”, responde ante las críticas.

Nostalgia y cariño por la época juvenil

Vicman recuerda con cariño aquellos años de televisión juvenil, cuando la interacción con el público se daba a través de frases como “¡mensajea al número…!”. Su paso por la televisión fue breve, tan solo cinco años, tras los cuales decidió retirarse pese a recibir varias ofertas.

“La TV es muy ingrata y tiene sus formas de trabajar. Nunca quise seguir en ese mundo. Tuve algunas oportunidades y tenía público, pero quería hacer algo más. Hoy me siento honrado y agradecido porque, donde nadie debería recordarme, la gente aún lo hace”, reflexiona.

Hace poco, Vicman reapareció en las redes sociales del canal Mplus, transmitido por YouTube e Instagram. Su retorno sorprendió a muchos, quienes lo reconocieron de inmediato al ver sus cápsulas musicales que exploran décadas pasadas y cuentan la historia detrás de los videos, en el espacio llamado Música de garaje.

Gente de su generación lo reconoció y le dio la bienvenida

Quienes lo reconocieron, de inmediato reaccionaron con mensajes. “Me escriben cosas chéveres. Lo bonito es cuando me dicen ‘le estoy mostrando a mis hijos lo que yo veía a su edad’. Si marqué una generación, no lo sé, pero sí estoy seguro que a un buen público sí”, asegura.

Hoy, junto a su hermano y socio, dirige una productora que le permite seguir conectado con su gran pasión: la música. “La música fue y será mi primer amor. La quise recordar viviéndola, porque no hay mejor forma de recordar las cosas que volviéndolas a vivir”, afirma mientras toma un sorbo de mate, de los casi dos litros que se toma a diario.

• Familia

Es casado y padre de una niña

• Cabello codiciado

Las mujeres siempre le preguntan con qué productos se cuida el pelo para mantenerlo sedoso. Le roba el champú a su esposa y se hace tratamientos.

• Estilo oscuro

Siempre usa ropa oscura, porque así no pierde tiempo al momento de vestirse en las mañanas.

• Sin baúl de recuerdos

De su época en canales UHF, dice no tener imágenes. Tampoco las hay en YouTube.

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