Una familia Pluricultural y de arroz con menestra. Así califican a su unión la presentadora Fernanda Gallardo (33) y el productor Ricardo Blanco (29). Ella y su primera hija (Sofi) son chilenas, él es cubano y los dos hijos en común (Alejandro y Maximiliano) ecuatorianos.

Aunque hay una mezcla de países, todos coinciden en algo especial: el gusto por el arroz con menestra. Tanto así que ese será uno de los platillos que se servirán en la boda de esta parejita. Se casarán el 10 de septiembre en una ceremonia en vía a la costa.

Fernanda y Ricardo trabajaron en más de una ocasión juntos en realities como Calle 7 y BLN, pero fue fuera de estos en donde nació el amor (2018), pues ella era muy amiga de la mamá de él y fue por esa vía que lograron conocerse más, hasta el punto de formar un hogar y tener dos hijos.

¿Cómo inició ese amor?

Fernanda: Nos dimos el primer beso y nunca más nos separamos, con eso dimos por entendido que era una relación.

Ricardo: Cada uno se da cuenta cuando es el momento ideal. No tenemos peleas ni nada de eso; a veces sí nuestros desacuerdos, pero al final lo resolvemos. Tenemos un hogar bonito.

¿No tienen peleas?, ¿nadie se enoja?

R: Soy el más enojón, pero también el que recapacita más rápido.

F: Él se enoja, pero pide disculpas enseguida. Yo me enojo muy poco.

R: Se ríe de todo, incluso hasta de lo malo.

¿Quién es el más tóxico?

F: Él es un poquito celoso, pero ya ahora, con el pasar de los años.

R: Cinco centavos y es mucho. No soy nada celoso.

F: Bueno, jamás nos revisamos el teléfono, incluso tenemos las contraseñas (...) Estamos tranquilos, tenemos una relación transparente y sólida.

Y el más detallista...

R: Fernanda hace la mayoría de cositas lindas.

F: Sí, pero con los treinta lo fui perdiendo. Antes era la que cocinaba cenitas, ahora necesito que alguien me ayude.

R: Todo lo que hace es rico. Ella es una chef.

¿Qué los enamoró el uno del otro?

R: Todos le huyen a la mujer con hijos y mi sueño siempre fue tener hijos. La veía cómo era con Sofi y la vi como la madre de mis hijos, también me gusta cómo me cuida.

F: Que es un hombre que siempre me hace reír. A veces se pone un poco tenso y estresado y le digo que no se olvide de su esencia, de lo que me enamoró de él. Nunca voy a olvidar que cuando comenzamos le dije: ‘eres el hombre con el que jamás me voy a despertar triste’.

Con respecto a la boda, no es la primera vez que quieren casarse...

F: Cuatro intentos. Primero quedé embarazada (Alejandro). Luego vino pandemia. Después vino Maxi. Ahora que quisimos se nos presentó un trámite por mi primera hija (Sofí) es como un juicio. Tuvimos que aplazar el matrimonio, pero se me ocurrió decir que nos queríamos casar en septiembre y mi familia en Chile compró los pasajes. Cuando nos dimos cuenta ya tenían 10 boletos. ¡No hay marcha atrás!

¿Cómo van esos planes?

F: (Suelta una carcajada) Soy la que me encargo de todo. Soy la wedding planner (planeadora de boda). Él no sabe nada.

R: Me dice algo y le respondo que sí a todo, porque confío en sus detalles y gustos (risas).

Y el vestido...

F: Karla González me lo diseñará. Yo saltaba de la emoción porque sacar una cita con ella es casi con un año de anticipación. Han pasado cosas lindas.

R: Yo haré un baile con mis amigos que terminará en un desastre.

F: (Risas) Él no sabe nada, no tiene idea de cómo va la organización. Hasta ahora van unas 70 personas entre familia, allegados, amigos del medio. ¿Habrá luna de miel?

R: Sacrificaremos nuestra luna de miel y ese dinero lo utilizaremos para traer a mi papá y que conozca a sus nietos.

F: Ya vendrá después, ahora tenemos prioridades y esa es una. También queremos aprovechar y pasar con nuestra familia que viene de otros países.

Distintos países, costumbres y gastronomía. Hay ecuatorianos, cubanos, chilenos, ¿cómo hacen para estar todos de acuerdo?

F: Acá comemos de todo, pero somos una familia de arroz con menestra. Aunque también comemos arroz con atún. Somos una familia multicultural. El chef de la boda me decía para hacer el arroz con menestra en la boda y eso se hará. Está en las opciones de la noche. También se serviría empanada chilena.

R: Ecuador es nuestro hogar, ya nos acostumbramos al clima, la gente, aquí son muy sandungueros.

Con el anuncio de su boda, vuelven a salir en programas de farándula. Llevan alejados de la TV unos dos años ¿la extrañan?

F: Los sueldos de la TV aquí no son tan altos y con lo que trabajamos en casa, se puede compensar.

R: No puedo decir que no regresaría, pero por ahora no me atrae. Estoy enfocado 100 por ciento en lo mío, la televisión es relativa, hoy estás y mañana no sabes.

Pero sí existieron ofertas...

F: Rechacé oportunidades de proyectos como: radio, programas online, de unas tiendas, entre otros. Para volver a la TV tiene que valer la pena.

Y ahora trabajan subiendo contenido familiares...

R: El éxito de nosotros es mostrarnos tal y como somos. Antes nos decían ‘los sigo de Calle 7 y BLN’; ahora no, nos dicen que ven los videos de nuestras redes sociales y que nos conocen, entonces eso es bonito porque somos ese contenido familia.

F: Trabajar en casa es mi mejor decisión. Puedo hacer dinero y cuidar a mis hijos, también tenemos una empresa de producción y creamos contenido para marcas (...) Dejamos la TV y la vida cambió.