Aunque admite que dio show y que implementó varias estrategias para ganar ‘Desafío a la fama’, el actor Diego Álvarez, más conocido como Don Day, dice que en esta ocasión fue el primer reality en el que no pudo utilizar todas sus ‘armas’, ya que está ‘amarrado’ con la modelo salvadoreña Elizabeth Cader.

La relación es tan seria, que el denominado Cholo de los Labios Rosas piensa en casarse y tener hijos. De estos y otros temas, habló con EXTRA.

Agradecido totalmente con el público que me respalda, con una fe muy grande. Tengo una familia linda, una novia hermosa y culmino este reality siendo el ganador.

Fue muy dura, creía que no podría hacerlo. Tuve miedo porque no podía ofrecer ese show de conflictos, romances; por ese lado pensaba que no podría llegar al público, pero, por otro lado, no hacía lo que, en algún momento, el público me criticó, que era fingir peleas, romances, hacer un show de mi vida.

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Las especulaciones se dieron cuando yo estaba adentro. Ahora lo quiero contestar: no fue cierto, Eli ingresó para sumar al proyecto (...) Nada fue amarrado. Yo no hice show porque no podía poner en peligro mi relación. Mi triunfo fue sorpresivo. Pensé que llegaría a la final con Kachafa.

Cuando la trajeron dijeron (los otros participantes) que yo era el engreído de la producción. Agradezco que mi mujer haya entrado. A ella no la pedí, lo que sí llegaron a decirme los dueños del proyecto, era que en un mes entraba, pero pasó el tiempo y nada. Cuando lo hizo, mi felicidad fue evidente. Les dije que no podía pelearme con mi mujer o pedirle matrimonio frente a las cámaras o un reality. Así que si esperaban eso de mí, no lo haría.

Los movimientos no podían disimularse. No le iba a decir: Vamos a fingir un ‘palito’. Dentro de lo que se pueda criticar y exponer, solo diré, ¿quién no lo hace? Ella no es mi novia de dos días, es mi futura, el amor de mi vida.

No se podía hacer muchas cosas, de ladito, habladita en la oreja (risas).

Es más una cuestión de formalizar, no quiero decir boda, porque no quiero que lo espere, quiero que sea sorpresa. No pensé hacerlo dentro de la casa (en el programa) porque le prometí que la iba a cuidar y que nunca sería un contenido.

No puedo decir más, pero se viene un año con muchos proyectos. No sé si alguien como yo pueda ser galán de novela, alguien así de ‘sexi’ (risas), pero mi personalidad me ha ayudado a estar en novelas. No me considero galán, sino sexi.

Quizá ese momento en el que salía ese Don Day enojado. Me arrepiento de esos momentos de discutir.

Ya lo hice, siento que a la única que debía pedirle disculpas era a Conny Garcés, por un momento incómodo que pasamos y que se me salió de las manos.

Totalmente, se lo dije a ella y lo digo para este medio. Discúlpame (...) no soy del tipo de hombre que anda hablando mal de una mujer. 

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