Han pasado cerca de cuarenta años y la imagen del pequeño Mateo Santelli, en la serie El ángel de piedra, todavía ronda a Christian Norris, su protagonista.

Pese al éxito de la serie y de haber participado en más de treinta y cinco producciones y varios programas, el quiteño de raíces inglesas y cuencanas, no se quedó en la televisión y se dedicó a otras actividades, el turismo que combina con la gastronomía.

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Su retorno a la ‘pantalla chica’ se dio tras la invitación que le hiciera en 2023 la productora María del Carmen Arellano, para que se uniera al grupo de MasterChef Celebrity 1, pero la rechazó por sus ocupaciones. Un año después, Norris estuvo entre los favoritos del público, incluso llegó al top 8 de los mejores cocineros, entre 24 competidores. Fue eliminado por un plato que no convenció a los jueces.

Su gusto por estar rodeado de ollas, aromas y sabores, lo llevan a su niñez al recordar a su padre inglés, preparar platos a base de especias. Recetas que aprendió en sus diferentes viajes a Asia y que Christian, de 48 años, replicó varias veces con éxito en la competencia.

“Mi casa todos los fines de semana se llenaba de aromas exóticos, de la canela, el cardamomo, el curry, y siempre tuve como que una cercanía a esa cocina de casa, pero también elevada. Mi papá cocinaba muy rico”, detalla.

Otra favorita es Shany Nadan

Cuando la competencia está a pocos días de concluir, el lunes 24 de marzo es la final, Norris espera que sea María Teresa Guerrero, ‘La flaca’, quien se alce con el trofeo y los premios. Y si no llega, otra de sus favoritas es Shany Nadan.

“Tenemos una relación muy cercana de amistad y de cariño con ‘La flaca’. Yo quiero que ‘La flaca’ gane. Nos apoyamos todo el proceso, trotamos todos los días, nos dimos ánimos”, dice el exparticipante, quien compartió, en 2000, con Guerrero el set de la novela Sin Límites, cuando eran veinteañeros.

Divorciado y padre de dos varones de 19 y 12 años, Norris aclaró que una cosa es armar una historia linda y potente y otra es la realidad. “La flaca tiene su vida, tiene su novio y es feliz en Boulder”, sostuvo.

Anhela ser Ministro de Turismo

Haber vivido en Galápagos durante su infancia y regresar a ese sitio, recorrer todo Ecuador creando videos de cada rincón del país, nutrirse de las culturas de sus pueblos, involucrarse con la gente, su gastronomía y trabajar en 2024 como director de Relaciones Internacionales del Ministerio de Turismo, es el gran paso para cumplir su anhelo de ser Ministro de Turismo.

“Cuando yo sea ministro de turismo, la voy a romper. Ya tengo experiencia en el sector público y sería feliz si asumiría un reto así. Creo que podemos hacer grandes cosas”, asegura.

Unir a sus dos amores

Dice conocer Ecuador como pocas personas, ni siquiera los políticos. “Este país es maravilloso, es gigante. A mí me frustra cuando dicen que es chiquitito. Ecuador es del mismo tamaño que todo el Reino Unido, me refiero a Inglaterra, Escocia, Irlanda del Norte y Gales, no terminas de conocerlo nunca, porque es inmenso”, argumenta.

Cuando se retire tiene proyectado unir a sus dos amores. Se irá a vivir a San Cristóbal, su casa desde hace 40 años en Galápagos y abrirá un restaurante. “Mi sueño es retirarme allá con un restaurante y hacer algunas cosas en Galápagos”, explicó.

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