El cantante chileno Américo llegó a Ecuador la madrugada de ayer. Con ojeras por los viajes que ha realizado, pero feliz de regresar porque le encantan la gastronomía, paisajes y su gente. Tanto es el interés por los ‘tricolores’ que le confiesa a EXTRA que a diario consume noticias de lo que pasa en lo deportivo, en la comunidad y en la inseguridad...

Se encuentra de estreno con su tema ‘La culpa’

Es demasiado lindo para una historia romántica y dolorosa. Aprovechando la amistad con Jessi Uribe (cantante colombiano), me escribió la canción y debía incluirla en mi disco ‘Cumbia despechada’.

La carrera de un cantante está llena de sacrificios...

Creo que el trabajo siempre es un desafío, la vida en sí lo es (...) pero lo complicado es mantenerse vigente y estar en el corazón de la gente y creo que lo he logrado.

¿Casi nunca pasa en casa?

Es esfuerzo y los sacrificios son mucho más profundos que vivir en los aeropuertos, los hoteles y comer a horas no adecuadas. Me encantaría pasar más tiempo con mis hijos o estar en mi casa sin hacer nada (...) Les transmito que quiero ser feliz y que ojalá entiendan y vean a su papá feliz, no en casa frustrado, sino haciendo lo que le gusta. Siempre fui honesto y justo con ellos en decirles la verdad.

¿Cuál fue el mayor desafío en su carrera musical?

Hace unos tres o cuatro años se instaló otra forma de hacer música: la digitalización. Se suman el pop, el trap y lo urbano. Vi que muchos cambiaron lo que venían haciendo e incursionaron en otros géneros.

Usted lo hizo...

Hay muchos artistas haciendo cumbia (...) Igual probé otras cositas con Silvestre Dangond (colombiano) y Nacho, que aunque la base de los temas era la cumbia, se sentía muy fuerte el pop. Siento que está bien salir y divertirse con nuevas cosas, hasta donde uno pueda. No puedo pretender interpretar música a la cual no pertenezco.

Nos contaron que sigue las noticias de Ecuador

En mi ranking de noticias están: Chile, Ecuador y Estados Unidos. Hace poco estaba tenso con lo que estaban viviendo por el Mundial y la nacionalidad de Byron Castillo. También la ola de violencia que soportan.

Violencia que acabó con la vida de uno de sus amigos...

Cuando murió Efraín me dolió mucho. Compartí un montón de ocasiones con él. Lloré la pérdida de Efraín porque lo recuerdo.

Usted es denominado el Rey de la cumbia, ¿cree que es así?

Fue en una entrevista con CNN. Recuerdo que me lo dijeron con mucha simpatía y no lo creía. Después me gustó y lo disfruto. Ya me encanta y siento que tengo una responsabilidad de llevar a cabo el género.

Los artistas tienen muchas anécdotas, ¿hay una en especial?

Recuerdo que fui a un festival en Chile y no estaba en un buen momento de mi carrera porque empezaba como solista. Tuve una participación pequeña, pero la figura de la noche era Leo Dan (argentino). Lo veía de lejos y tenía un camerino maravilloso. Cuando estaba en el aeropuerto me toca el hombro Leo para preguntarme algo del vuelo y aproveché la ocasión para conversar y lo terminé invitando un café. Me transmitió su conexión con Dios y me dijo que debía seguir defendiendo mi nombre. Tenía pocos pesos en mi bolsillo, pero me alcanzaron para pagar el café.