La pesista ecuatoriana Tamara Salazar acaba de lograr medalla de plata en los los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, en la disciplina de Halterofilia. Tamara se sube al podio olímpico ecuatoriano tras las medallas doradas de Richard Carapaz y Neisi Dajomes. 

La ecuatoriana Tamara Salazar y la dominicana Crismery Santana conquistaron las medallas de plata y bronce de la categoría de 87 kilogramos de la halterofilia de los Juegos de Tokio-2020. Las pesistas latinoamericanas solo fueron superadas por la china Zhouyu Wang, que cosechó el sexto oro de China en la halterofilia de Tokio-2020.

Salazar levantó un total de 263 kg (113+150) y Santana alzó 256 (116+140), a considerable distancia de los 270 kg de Wang (120+150), campeona de los Mundiales de 2018 y 2019.

ARRANQUE

Las competidoras iniciaron el las competencia con pesos conservadores en arranque, Tamara Salazar lo hizo con 108 Kg, los cuales levantó sin inconvenientes, pese a que su fuerte es el envión. El segundo intento fue de 111 Kg, mientras que en el tercero sumó 113 Kg. Con este último peso permanece a espero de la etapa de envión que arrancará en unos 13 minutos.

Ya en el segundo arranque, empezó levantando 144 kg que ya le adjudicaba medalla. Pero fue cuando pudo levantar 150 kg que alcanzó la presea de plata en los JJ.OO., para un total de 263 kg en total.

La deportista nacional aceptó el desafío y sabía que no será fácil, tal como se evidenció el camino por el que tuvo que transitar para conseguir el boleto a la cita deportiva más importante.

“Sé de lo complejo y duro que va a ser la clasificación y posterior participación en Tokio, pero estoy dispuesta para el desafío. Cuento con el nivel y puedo darle una alegría al país”, dijo convencida la ecuatoriana antes de viajar a en mayo a República Dominicana para colgarse una medalla de oro y dos de plata en la división de los 87 kg del Campeonato Panamericano Sénior que se celebró en ese país.

Salazar está consciente del sacrificio que le tomó llegar hasta la justa deportista y lo que aquello significa, con la responsabilidad de dejar el alto el nombre del país en el continente asiático.     

“Es un grupo comprometido.  Hay experiencia y juventud que le ha venido bien al país. Queremos ser más en los Juegos y para eso hemos trabajado”, precisó Tamara en uno de sus múltiples concentrados para llegar en óptimo estado a la gesta ecuménica.