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Pollo Macías: ¡La posta para Su bisnieto!
Nos dejó a los 87 años de edad. Era defensa central. Fue 4 veces campeón. Uno de los precursores de la idolatría en el Ídolo.
“El Pollo nos dejó”, se escuchó decir. Pero ¿quién es el Pollo en el mundo Barcelona? En la década de los 60 apareció un defensa llamado Luciano Macías, quien hizo historia. Los abuelos contaban que era cosa seria a la hora de marcar al rival. Hizo de la parte central de la defensa canaria su casa, por ahí solo pasaban los que él dejaba.
Fue un grande que nos dejó una importante herencia: la entrega y amor por Barcelona. Dio cuatro vueltas olímpicas, en 1960, 1963, 1966 y la última en 1970.
El jueves 4 de agosto, su corazón se paralizó y el Pollo se unió a sus amigos de la famosa Cortina de Hierro: Alfonso Quijano y Miguel Cortijo Bustamante, dejando en la tierra a Vicente Lecaro.
El Pollo fue jugador y luego entrenador. Era un tipo con el que placía hablar. Vivía rodeado del mundo Barcelona, hablaba de la grandeza del equipo, de cómo en los 60 el dinero era algo secundario y que si hubiera sido jugador en los 2000, de seguro sería millonario.
Macías fue el precursor de la idolatría del Barcelona, que con su juego hizo que los hinchas se enamoren de esa camiseta. La entrega total era su carta de presentación.
SU HERENCIA
El lunes pasado Luciano recibió el último regalo de la vida: una despedida y un anuncio oficial, que solo Dios sabe si se hará realidad.
Su primera nieta, Marjorie Seminario, llegó con Dante Amat Seminario, el primer bisnieto de Luciano Macías. Fue como un adiós adelantado. Un encuentro entre el pasado, presente y futuro de los Macías futboleros. Dante apenas tiene 20 días de nacido.
“Fue el último día que vi a mi abuelito. Antes le había hecho una entrevista para un deber”, recuerda Marjorie, quien confesó que el Pollo quedó triste, debido a que no pudo cargar a su bisnieto, pero le dijo: “Dante en la delantera, vamos, Dante en la delantera de Barcelona”.
Esas palabras hay que guardarlas para el futuro, para que el legado de los Macías se mantenga.
PELÉ DOS VECES
Hablar con Luciano era como revisar una enciclopedia deportiva. Años atrás le confesó a EXTRA que cuando no existía la absurda rivalidad entre Barcelona y Emelec, en 1960 le tocó reforzar al Bombillo para jugar ante el Santos, en el que jugaba un tal Pelé. Sí, el rey del fútbol.
Y en 1962 volvió a enfrentar al brasileño, pero ya vestido de amarillo. Incluso hay una foto juntos que quedó para el recuerdo.
Hace unos pocos años, cuando Macías se enteró de que O Rei, como también llamaban a Pelé, había perdido la movilidad, comentó: “Es muy triste lo que le está pasando. Él es una figura que, pese a su edad, se mantenía vigente. Me pongo en sus zapatos, sé lo que puede estar pasando, pues para él debe ser muy duro ya no poder movilizarse como antes”. Ahora, Luciano ve a Pelé desde el cielo.
El Pollo nos deja la herencia de un hombre sencillo entregado a una carrera más amateur que profesional, cuando dejar el 100 % del esfuerzo en la cancha era un compromiso para cualquier jugador.
Hoy le decimos adiós a Luciano Macías, quien se junta con sus ‘panas’ de la Cortina de Hierro amarilla al cielo.
Sus restos están siendo velados en la sala # 4 del Parque de la Paz (Aurora). El sábado 6 de agosto del 2022 a las 09:00 se celebrará la misa y luego vendrá el adiós final.
Sin embargo, en el alma de los barcelonistas vivirá por siempre el ‘ñeque’ de este jugador que por 10 años fue el capitán del Ídolo... y también su premonición: “Dante en la delantera”.