Bien pudo, o podría en el futuro, estar en el banco de suplentes de las selecciones de Ecuador o Uruguay, que se enfrentan el martes 12 de septiembre del 2023, en el estadio Rodrigo Paz de Quito. Hablamos de Guillermo Almada, quien fue parte de la selección charrúa y trabajó en Barcelona.

Almada, entrenador del Pachuca de México, comenta sobre este encuentro, donde Ecuador va por salir del último lugar de la tabla de posiciones.

El uruguayo ha estado en la mira de estas dos selecciones y conoce a sus jugadores. Además, sabe muy bien la historia entre estos dos rivales.

¿Fortalezas de Ecuador?

La calidad que tienen sus jugadores, una generación de primera línea que demanda mucho cuidado y compite en las primeras ligas; lo segundo es que juegan de local en Quito y para Uruguay es un problema la altura. Además, destaca el juego en conjunto que tiene la Tri con una camada nueva y que se conocen.

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¿Y las cosas a favor de Uruguay?

El gran juego que hizo ante Chile, eso ayuda para llegar con el ánimo arriba. La calidad de sus jugadores, además juegan fuera de su país. Eso sirve de mucho. Y tiene bastantes variantes, había lesionados, pero se vio una buena selección. Jugar en Quito es un problema.

Los puntos altos que tienen los dos equipos.

Será un partido difícil, lo de Uruguay es el juego colectivo de varias características, y algo parecido de Ecuador, será un cotejo con una definición incierta. Con el dolor en el alma puedo decir que el favorito es Ecuador, por ser local y el lugar donde jugamos. A Uruguay le cuesta jugar en la altura.

Usted dice por el lugar donde jugamos, se le sale lo ecuatoriano.

Es por el sentimiento que tengo al país y porque conozco bien a Ecuador, me siento muy identificado por todo lo que sé, conozco mucho el medio, la geografía, su gente.

Como entrenador ¿habría llamado a Dixon Arroyo y Leonardo Campana?

Son jugadores que están en un gran momento, me imagino que el cuerpo técnico les dio seguimiento y piensa que los que tienen son los mejores ahora. La idea es apoyar a los que están y no pedir a los que no están. Eso es así. Sé que mucha gente pide a Arroyo y Campana, pero los entrenadores siempre creemos que pedimos a los mejores.

La eliminatoria es larga y hay que ver qué pasa después.

Los partidos ante Uruguay son raros, con goleadas, uno que otro golpe y hasta, para Ecuador, ha sido el más importante por la famosa clasificación del 2001. Usted estuvo en uno.

Fue en Uruguay, ganamos 3-2, estuve en el banco, son partidos muy bien jugados, hay mucha fricción. Ojo, debido a la altura, seguro que no vamos a tener (Uruguay) todo el volumen de juego como lo que se vio con Chile.

Será un partido donde el cambio generacional se nota en los dos equipos.

Hay mucha polémica porque ya no están Lugano, Cavanni y Suárez, estos dos están en un buen momento, pero son decisiones que toma el entrenador, quien siempre quiere tener a los mejores jugadores. Lo bueno es que hay mucha materia prima y hay chicos como un buen recambio.

Lo mismo le pasa a Ecuador, eso es bueno y sobre todo porque contarán con excelentes jugadores.

¿Qué tanto cree que afecta a Ecuador estar con menos tres puntos en la tabla?

Es una desventaja muy grande, que no es común, pero hay muchas posibilidades de subir. Ojo, no son las mismas eliminatorias pasadas, ahora se tiene 6.5 cupos y es una facilidad. Ahora hay que mirar con positivismo que la selección de Ecuador va a estar bien. A finales de año seguro que estará encaminada al Mundial.

Caicedo y Pervis llenan los ojos de todos, pero ¿qué jugador lo sorprende aparte de ellos?

Félix Torres es un extraordinario defensa, tuve el lujo de tenerlo en Santos; Robert Arboleda es buenísimo, no voy a enumerarlos a todos, pero hay una base extraordinaria de jugadores en la selección de Ecuador.

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