Con tantos de Bruno Piñatares, Fidel Martínez y Jonatan Álvez, Barcelona se impuso 0-3 al Deportivo Cuenca. El equipo de Fabián Bustos llegará este fin de semana al Clásico del Astillero ante Emelec con el envión anímico de la goleada que le asestó la noche de este martes a los morlacos en el estadio Alejandro Serrano Aguilar, por la fecha 6 de la LigaPro.

Desde el inicio del compromiso, los canarios lucieron ordenados con un planteamiento que propuso en cancha tres volantes dándole libertad a los Martínez (Fidel y Emanuel), que a su vez se vio reflejado en acciones de peligro. En los primeros minutos Emmanuel estrelló un tiro libre en el vertical y Fidel metió el rebote pero en offside.

De su lado, el juego del Deportivo Cuenca lució más trabado. Dos o tres jugadas cortas y una larga en los primeros 10 minutos de partido no dejaban brilla al equipo que jugaba en casa con un Mancinelli que hacía todo por llegar al arco rival, aunque sin éxito.

El gol llegó al minuto 25, luego de varias amenazas del equipo visitante. Matías Oyola levantó un tiro libre-centro desde la banda derecha que peinó Piñatares ante Heras que nada pudo hacer para detenerla.

El tanto es el primero del jugador uruguayo exDelfín en Barcelona. Lo celebró a voz en pecho.

Ya para la final de la primera mitad el Cuenca siguió buscándola, pero no lo consiguió. El tiempo complementario fue otra película. Los dos equipos salieron muy movedizos en busca de cambiar el marcador. Los dueños de casa intentaron llegar, pero se encontraron con un Barcelona más agresivo, aunque aplomado y concentrado en una misma idea de juego que era la de no arriesgarse y hacer lo necesario ante el Cuenca.

Al minuto 54 las amenazas canarias tuvieron una consecuencia tras la falta en el área al Tin Angulo que fue decretada como penal. Fidel Martínez fue al cobro un minuto más tarde y no falló.

Las acciones de peligro siguieron, pero decayeron hasta que al minuto 75 todo pareció "apagarse". El Deportivo Cuenca en cambio aprovechó esa pasividad de los toreros y al minuto 82 y 87 cuando Neculman y Dorregaray, en ese orden, tuvieron las dos jugadas más claras de gol del equipo dueño de casa, con tan mala suerte que ambas se fueron por arriba del horizontal que custodiaba Burrai.

No fue sino hasta el minuto 91, en que Jonatan Alvez y Adonis Preciado, quienes entraron para el Ídolo en el complemento, parecieron haber fabricado una jugada en la que el segundo pegó un balonazo al cuerpo del portero Heras que rechazó mal y que Alvez remató dejándola al fondo de las redes. Ya era goleada.