Independiente del Valle y Emelec se enfrentan mañana en busca de dar el primer paso a la corona de la LigaPro.

Los jugadores eléctricos han vivido este momento en repetidas ocasiones. Están acostumbrados al partido definitivo por el título local. Mientras que los rayados están a las puertas de su primera corona de LigaPro.

Si bien Independiente alcanzó la gloria internacional con la Copa Sudamericana en 2019, la mayoría de esos jugadores ya no están. Además, el proceso de recambio constante en ese equipo ha provocado que muchos jóvenes hayan encarado situaciones críticas por un título en años anteriores. Y su inexperiencia pasó factura. Se quedaron a un paso.

Pero esta vez es diferente. Al menos, desde la conformación del plantel. El DT Renato Paiva complementó ese equipo de jóvenes con futbolistas cargados de experiencia y que saben encarar finales. Ahora luce como un conjunto equilibrado, con gente que ya tiene éxitos locales.

Emelec, en cambio, es un animador constante del campeonato nacional. Sabe cómo encarar estos compromisos. No en vano ha ganado finales consideradas históricas, como el Clásico del Astillero o la vuelta olímpica en el Rodrigo Paz Delgado.

Ismael Rescalvo se valdrá de esa historia para tratar de buscar su primera corona como entrenador. Su plantilla tiene jugadores de jerarquía y que han demostrado un manejo correcto en estas instancias.

Los azules, en el papel, tienen la experiencia a su favor; pero también cuentan con futbolistas jóvenes que quieren sumar la primera estrella a su hoja de vida.

Los rayados encontraron el equilibrio

Independiente del Valle terminó tercero en la primera etapa de LigaPro. Después de un inicio con problemas, el equipo se recuperó en la tabla y empezó a pelear en la parte alta. Sin embargo, no le alcanzó para meterse en la disputa por el primer lugar.

El diagnóstico de Renato Paiva fue que faltó un poco de experiencia y jerarquía para encarar los momentos críticos. Entonces, decidió retocar la plantilla y contratar a jugadores con recorrido local e internacional.

Cabe anotar que la mayoría de figuras que llevaron al equipo al título de la Copa Sudamericana 2019 fueron transferidas. De los titulares de esa final, ante el Colón argentino, solo se quedaron Richard Schunke, Luis Segovia, Efrén Mera, Anthony Landázuri y Cristian Pellerano.

Así, llegaron para el segundo semestre de 2021 Fernando Gaibor (30 años), Jonatan Bauman (30), Junior Sornoza (27), José Angulo (26) y Mateo Carabajal (24). Ellos potenciaron a una nómina que si bien tenía éxitos deportivos, habían sido a escala de eventos juveniles como la Libertadores Sub-20 o el Mundial Sub-20. Faltaba el gran paso en la Primera División.

Con esta mezcla de talentos jóvenes y jugadores con mayor jerarquía, Independiente dio un golpe sobre la mesa en la segunda etapa de LigaPro. Solo en la primera fecha estuvo en el quinto lugar. A partir de la segunda jornada agarró la punta de la tabla y no la soltó más.

Ahora, el promedio de edad del once base es de 26,5 años. Hay un solo futbolista menor de 20: Jhoanner Chávez (19). El segundo más joven es el golero Moisés Ramírez (21). A partir de ahí, los titulares son jugadores con cierta madurez, como Luis Segovia (24), Anthony Landázuri (24) y Nicolás Previtalli (26). Y hay otro grupo con mucho más recorrido, formado por Richard Schunke (30), Lorenzo Faravelli (28) y Cristian Pellerano (39).

Pero el proceso de formación de jóvenes no se rompió. En todas las fechas siempre hay juveniles convocados para el banco de suplentes y que han sumado minutos en la temporada, como José Hurtado (19), Marco Angulo (19), Brian García (20) y Mateo Ortiz (21). Por ellos, el promedio de la plantilla total es de 25,5 años.

Después de todo, la filosofía de los rayados es formar talentos de exportación. Incluso, en esta misma temporada transfirieron a Pedro Vite (19), una de sus ‘joyas’. JLV

Los eléctricos son cancheros en finales

En los últimos 12 años, Emelec ha jugado seis finales de torneos nacionales, lo que le otorga al cuadro millonario esa dosis de experiencia para jugar esta clase de partidos.

El Bombillo suma en total 14 títulos a escala local, de los cuales ha conquistado tres bajo este sistema adoptado desde 2009.

Pero para saborear la gloria, primero tuvo tropiezos en las finales ante Liga de Quito y Deportivo Quito en 2010 y 2011. Recién en 2014 tuvo la oportunidad de celebrar un título en una serie de ida y vuelta. Y fue ante Barcelona, en la llamada Final del Siglo.

Los eléctricos empataron en el estadio Monumental 1-1, mientras que en el Capwell ganaron por 3-0. Esa corona, que fue la número 12 de Emelec, marcó un hito en la historia del balompié ecuatoriano, pues era la primera vez que los clásicos rivales se medían en un duelo por el título.

Al siguiente año Emelec disputó otra final, ante Liga de Quito. El Bombillo tuvo la oportunidad de tomarse la revancha de los duelos decisivos de 2010 ante los albos.

El compromiso de ida derivó en un 3-1 a favor de los millonarios en el estadio Reales Tamarindos. Para el compromiso de vuelta, en el estadio Rodrigo Paz Delgado, un empate 0-0 le bastó al representativo azul para dar la vuelta olímpica en Ponciano, con el argentino Omar De Felippe en el banquillo. Allí se dio el tricampeonato de los eléctricos, pues en el 2013 ya habían sido campeones directos sin necesidad de final al ganar las dos etapas del campeonato.

En 2017, los eléctricos volvieron a disputar una final. Esta vez el adversario fue Delfín, que sorprendió al ganar la primera etapa del torneo. Sin embargo, la segunda fase fue para Emelec. Con Alfredo Arias en el banquillo, los azules disputaron las finales. Durante la ida celebrada en el estadio Capwell, los millonarios vencieron por 4-2. En la vuelta, en el Jocay, Emelec ratificó la superioridad al llevarse la victoria por 2-0.

En 2018 los eléctricos jugaron su última final y tuvieron como rival a Liga de Quito. En el Capwell el duelo terminó 1-1, mientras que la vuelta en el estadio Rodrigo Paz fue favorable para los azucenas por 1-0. JSN