Cuando Diego López puso a Gabriel Cortez en la plantilla ante Libertad y el Loco anotó en Loja, ese detalle estaba asegurando su continuidad en Barcelona; se pensaba que había recuperado a un jugador.

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Pero cuando dio la alineación ante El Nacional dejó de lado al jugador que venía recuperando, y a eso se sumó que faltando ocho días para un partido le daba descanso a varios jugadores, entre ellos a Javier Burrai, quien en tres años (2020, 2021, 2022) había jugado todos los 30 partidos. Supuestamente, la dirigencia se dio cuenta y dijo no va más López.

Lo que el entrenador venía haciendo en 9 partidos, 7 en LigaPro y dos en Libertadores, era “jugar con las alineaciones”, y ya no importaba cuál fuera el resultado que se tuviera ante El Nacho, el entrenador uruguayo se iba.

Se supone que la inseguridad de López hizo que le diera minutos a la mayoría, en su búsqueda del 11 ideal, pero nunca lo encontró. Por eso dijo “el clásico no importa”, porque él creía que iba a dirigir hasta cuando se enfrentara a Sao Paulo.

López es historia. Ser entrenador en Barcelona no es fácil. EXTRA conversó con exjugadores como Iván Hurtado, José Cevallos y Jefferson Montero. Este último fue dirigido por César Farías, quien también entró en el radar amarillo.

Para Hurtado, lo que le pasa al equipo en una semana antes de dos partidos claves es duro: “Barcelona, sin entrenador, es preocupante, es la primera vez en mi vida que veo que dos DT que se enfrentaron como Ever Almeida y Diego López fueron cesados, y Barcelona debe tener un entrenador urgente, porque a la vuelta de la esquina tiene la Copa”, dice Hurtado.

 Y se hace la pregunta ¿quién lo podrá dirigir? Es difícil decirlo. Es un equipo grande que debe tener un DT con buen contacto con los jugadores, eso se llama camarín, y sobre todo conocer dónde se juega, la mayoría de los partidos son en la altura”, expresó Iván Hurtado.

Mientras que para José Cevallos, exjugador y dirigente, expresó: “Hay un detalle, el nuevo entrenador no es que viene a hacer pretemporada, viene a dirigir ya, se baja del avión y ya tiene Copa Libertadores. Debe tener experiencia y sobre todo saber jugar en la altura y un estilo de juego, ir con todo al arco contrario. Es un equipo grande que siempre tiene que salir a buscar el partido, no quedarse atrás, ser protagonista”.

Ahora la búsqueda es del nuevo entrenador. Hay dos nombres, el venezolano César Farías, con quien los costos están a la altura del Barcelona, ya pagó la sanción que al inicio eran de 14 meses y se la bajaron a 9, por la agresión a Juan Ruiz y Braian Oyola cuando estaban en Delfín. Ahora Farías está en América de Colombia. A Farías la idea le gusta, pero a largo plazo.

Un jugador que fue dirigido por Farías en Aucas es Jefferson Montero, quien sobre él dice: “El Míster (Farías) trabaja igual como se hace en Europa, se hace lo que él dice, además conoce demasiado el medio, si viene a Barcelona, seguro que le va bien, sabe cómo es jugar a más de 2.000 metros sobre el nivel del mar. Ojo, un detalle, vendría a jugar sobre la marcha, sin tener un trabajo de pretemporada”.

El candidato más factible es el argentino Ariel Holan, actualmente no tiene equipo. Fue campeón de la Copa Sudamericana en 2017 con Independiente de Avellaneda y con Suriga Bank en 2018. Tuvo en sus filas a Fernando Gaibor y lo dirigió en Universidad Católica de Chile hasta 2023, pero también ha tenido experiencia en México y Brasil.

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