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Regreso a clases: Por una salud 10/10
Los exámenes médicos son la clave para un regreso a clases seguro y exitoso
Los exámenes médicos -antes de iniciar clases- son una herramienta fundamental para garantizar el bienestar y el éxito académico del niño. Para la detección temprana de problemas de salud, la promoción de hábitos saludables y la prevención de las faltas escolares, estas valoraciones son importantes porque desempeñan un papel crucial en el cuidado integral del infante.
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La salud es un activo invaluable, y más aún en el entorno escolar, donde el contacto cercano es inevitable. Es por eso que debe asegurarse de que el estudiante esté en óptimas condiciones físicas y de salud mental para garantizar un ambiente de aprendizaje seguro y productivo.
Un examen médico completo identifica los posibles problemas de salud que de otro modo podrían pasar desapercibidos. Desde problemas de visión y audición hasta condiciones crónicas (como asma o alergias), estos controles proporcionan una oportunidad para diagnosticar y tratar cualquier problema de salud existente o potencial antes de que afecte el rendimiento académico.
Además, en medio de la pandemia de COVID-19, someterse a pruebas médicas es aún más importante: ayuda a prevenir la propagación del virus en el entorno escolar y protege a los compañeros y profesores.
¿Cuáles son los exámenes de rutina?
La doctora Pravda Frías Gómez, pediatra de urgencias, docente y tutora pediatría del internado de la Universidad Católica Santiago de Guayaquil y máster en Gestión de Calidad en Salud y Seguridad del Paciente, recomienda los siguientes:
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Los escolares deberían realizarse por rutina una vez al año su control médico que incluye:
- De sangre. Incluye su perfil de anemia (glóbulos rojos , hematocrito , hemoglobina , hierro ), niveles de glucosa y proteínas totales en sangre.
- De orina. Para descartar la presencia de alguna infección urinaria que en los pequeños ocasiona hiporexia (un trastorno alimenticio que consiste en la pérdida gradual del apetito).
- De heces. Esta prueba ayuda a diagnosticar ciertas afecciones que afectan el tubo digestivo. Como por parásitos, virus o bacterias, absorción deficiente de nutrientes o en peor de los casos, cáncer.
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