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Buena Vida

Las redes son un arma de doble filo.PIXABAY

¡Las redes sociales no perdonan ni una!

En estos tiempos de redes sociales, la vida se ha vuelto más compleja. La gente se siente con el derecho de investigarte.

Todo aquel que tiene algún dispositivo digital se siente con el derecho a hablar mal de los otros. A esta acción se la conoce como acoso cibernético y es un problema creciente en el mundo 2.0. Compartir fotos vergonzosas e inventar y difundir historias falsas o íntimas de terceros es acoso virtual.

 ¿Es dañino? ¡Sí! Esa exposición no buscada trae efectos negativos para la víctima, que pueden derivar en depresión, ansiedad y problemas para dormir. 

La psicóloga Doménica Herrera sostiene que hay estudios que muestran que quien sufre este tipo de ataque corre mayor riesgo de, más adelante, consumir sustancias psicotrópicas y estupefacientes o, en el peor de los casos, podría llevarlo a la muerte. El también llamado bullying cibernético puede ser el más fácil de cometer, en relación con otros tipos de acoso, porque el acosador no tiene que enfrentarse cara a cara con el afectado.

La sociedad se enfermó y no camina en buena dirección, para destruir a una persona. Todos tenemos derecho a equivocarnos.

Hoy en día los linchamientos demuestran que algo sucede en el mundo virtual. Debemos ser más tolerables. Esta acción lo podría llevar a más allá de un problema psicológico: un suicidio.