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La súplica de una madre al ver el cuerpo desmembrado: ¡Que no sea mi hijo!
Este es el tercer hallazgo en menos de 10 días en el mismo sector, todos abandonados junto a basura. Nueva Prosperina lidera los crímenes en el país
Elizabeth Álvarez caminaba junto con dos familiares por la calle que divide Socio Vivienda 1 con la cooperativa Nueva Prosperina. En sus manos llevaba dos hojas con las copias de estos documentos: la cédula, la credencial del servicio militar y la licencia de su hijo, Dennis Iván León Álvarez. Iba rumbo al Laboratorio de Criminalística para confirmar si el cuerpo de su hijo había llegado a ese lugar.
Sin embargo, el caos, la multitud y la presencia de la policía, así como de militares que rodeaban la basura depositada por los moradores en una esquina de este sector, parte del distrito Nueva Prosperina, que registra el mayor índice de crímenes en el país con 222 asesinatos desde enero hasta la fecha, hicieron que se detuviera.
Ayer, tres sacos de yute fueron encontrados, en cuyo interior había restos humanos.
En uno estaba una cabeza, en otro, el torso y las piernas, mientras que en el tercero se hallaron los brazos. Este macabro descubrimiento hizo que Elizabeth se detuviera, temerosa de lo que pudiera encontrar. “Es mi hijo, es mi hijo, Dios mío, presiento que es él. Señor, que no sea mi hijo, por favor”, gritaba desconsolada, mientras sus familiares trataban de calmarla.
La señora relató a EXTRA que, desde la tarde del sábado, desconocía el paradero de Dennis Iván, de 37 años. Su angustia creció al topar con esta horrenda escena, que se ha vuelto cada vez más común en Socio Vivienda.

Este hallazgo fue el tercero en menos de diez días en este sector, donde los cuerpos desmembrados se han vuelto una trágica constante.
El 14 de marzo, en un contenedor de basura a solo 400 metros del lugar, fue encontrado el cuerpo de un hombre dividido en seis partes. La víctima fue identificada como Steven López Morán, de 27 años.
Tres días después, el 17 de marzo, en el mismo contenedor, se encontraron 22 piezas anatómicas distribuidas en seis sacos. Dos de las víctimas fueron identificadas como Lainer Herrera Soriano y Kenin Holguín Pincay.
Tras las pericias policiales, Elizabeth se dirigió al Instituto Forense para confirmar si los restos encontrados pertenecían a su hijo. “Él tiene un tatuaje con su nombre en el brazo y un dragón en la pierna. Diosito, que no sea él”, murmuraba mientras se alejaba junto a sus familiares.
A solo un kilómetro y medio de allí, en Socio Vivienda 2, el 6 de marzo, 22 personas fueron asesinadas en una masacre, la más brutal registrada en las calles del país.
Respuesta por la pelea de bandas
Una fuente policial indicó que las personas asesinadas son parte de organizaciones criminales y que la brutalidad con la que son ejecutadas es una señal de qué banda es más sanguinaria.
“Esto responde a la disputa entre las dos fracciones que están en guerra por este territorio: los Tiguerones Igualitos y los Fénix. Es probable que haya relación con la matanza del 6 de marzo”, explicó.
Por su parte, el teniente coronel Omar Arequipa, jefe subrogante del distrito Nueva Prosperina, sostuvo que la Policía continúa desplegando operativos en el sector y que estos hechos son represalias por conflictos violentos previos.
