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Quito: Estos barrios conviven entre penumbras, baches e inseguridad
Mis Vecis Unidos: Quienes viven en estos sectores del occidente temen salir pasadas las 21:00, porque la delincuencia los acecha. Piden ayuda urgente
El temor a ser víctimas de la delincuencia obliga a los habitantes de los sectores San Salvador y La Chorrera, del occidente de Quito, a evitar su llegada o salida a altas horas de la noche, porque la zona es acechada por maleantes que deambulan en búsqueda de personas a quienes asaltar y de objetos para robar.
Una muestra de aquello es la desaparición paulatina de focos, grifería y otros objetos de un área deportiva inaugurada pocos meses antes de la publicación de esta nota periodística (4 de julio de 2023).
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“La inseguridad está tremenda. Acá han asaltado a partir de las 21:00 y los vecinos tienen que guardarse”, sostiene la dirigente comunitaria de San Salvador, Mayra Enríquez, quien agrega que ese no es el único problema del lugar, porque también hay inconvenientes de alcantarillado, alumbrado público y de vías en mal estado.
La moradora explica que las calles fueron construidas hace más de 40 años y que la mayoría no ha recibido mantenimiento. Ella hace énfasis en que por lo menos se debería trabajar en “las vías principales, porque es frecuente el paso de los buses”.
Evelyn Maldonado, quien habita en el barrio La Chorrera, sostiene que el paso de vehículos grandes y el descuido de las autoridades encargadas de las obras públicas ha ocasionado que existan baches y que, además, sus casas tiemblen, porque los carros sufren movimientos bruscos.
Para “amortiguar en algo el problema, entre vecinos nos hemos tenido que poner de acuerdo y de nuestro bolsillo sacar para poner concreto”, señala la residente.
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Piden cámaras
Maldonado menciona que han hecho solicitudes formales para que se instalen cámaras de videovigilancia y alarmas comunitarias en el sector, además de mejorar el alumbrado público, porque los vecinos creen que esa sería una forma de combatir a la delincuencia. Ella lamenta que ante situaciones de riesgo “se llama a la policía, pero acá no suben”.
Mayra Enríquez cuenta que hasta hace diez años, aproximadamente, en el sitio había una Unidad de Policía Comunitaria (UPC), pero esta fue cerrada y ahora piden que en la zona haya resguardo. No obstante, dice, “no hemos tenido respuesta”.
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Quieren rutas que se integren
Evelyn Maldonado comenta que el deseo de ella y sus vecinos es que las rutas de buses que llegan y salen de este sector se integren también con el sistema de transporte Ecovía, porque en la actualidad los carros llegan únicamente hasta la Plaza del Teatro, en el Centro Histórico.
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