Besos, caricias, excitación. La temperatura sube. Estás listo para el sexo. Pero al quitarte el interior tu pareja se asusta al observar tu ‘herramienta’ chueca en plena erección. Se enfrían los cuerpos... Y la cama. 

Para ti puede resultar normal la curvatura de tu pene, pero esto no es algo que deba pasar ‘de agache’, porque lo que te está pasando es un trastorno que arquea tu órgano viril. Aunque no es una de las lesiones más comunes, sí puede ser una de las más temidas y por eso es recomendable estar atento y tomar las medidas necesarias.

Ese problema es conocido como la enfermedad de La Peyronie, en la que el tejido cicatricial del pene hace que se doble, se curve o pierda longitud o grosor. Puede hacer sentir el tejido cicatrizante (placa) a través de la piel o dolor en alguna parte específica del pene a medida que se forma el tejido.

Los expertos de Boston Medical Group, una red internacional de médicos que comparten información sobre salud sexual, nos han dejado las claves para saber reconocerlo y, sobre todo, detectar el momento en el que debes ir a un especialista.

Los síntomas

Este problema suele aparecer a partir de los 20 años, aunque los más veteranos no se salvan, ya que puede pasar también a los 80.

No tiene un origen concreto, pero es cierto que se reconocen varios factores que pueden estar implicados en esto. Por ejemplo, la predisposición genética, haber recibido tratamientos de radiación... Pero también un golpe en la zona genital, practicar el acto sexual con brusquedad o intentar forzar la penetración sin la lubricación suficiente.

Con una exploración física para identificarlo sería suficiente, de esta forma se identifica la ubicación y la cantidad de tejido cicatricial.

La terapia

En cuanto aparezca el dolor acuda a un especialista. Lo primero que se hace es diagnosticar en qué grado está y a partir de ahí comenzar con el tratamiento.

Actualmente, el tratamiento más novedoso para curar esta enfermedad es enviar ondas de baja intensidad y alta energía que ayudan a quitar el dolor que genera esta curvatura. Esta terapia acelera los procesos de autocuración de la zona dañada. Además, se mejora la circulación sanguínea y la potencia sexual.

Ojo a los consejos

1. Estiramiento

La terapia de tracción (o estira-miento) utiliza un dispositivo para estirar el pene y, a veces, incluso doblar el pene en la dirección opuesta a la curvatura.

2. Dolor

Los medicamentos para el dolor, como el ibuprofeno y similares, pueden ayudar con el malestar y reducir la inflamación. Existen medicamentos que mejoran el flujo sanguíneo en el miembro viril.

3. Fase aguda

Esta etapa dura entre seis y 12 meses. Durante este período, la cicatriz se forma debajo de la piel del pene, provocando la curvatura u otro cambio en su forma. Asimismo, puede sentir dolor cuando el pene está erecto o blando.