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La ONU reconoce la boda indígena de Yaku Pérez y Manuela Picq
Manuela y Yaku celebraron en 2013 su enlace ancestral, matrimonio que la ONU acaba de reconocer y pedir a Ecuador que haga lo propio, lo que para el líder indígena "sienta un precedente histórico"
Con la luna llena y la laguna de Quimsacocha como testigos de honor, Yaku Pérez y Manuela Picq celebraron en 2013 su enlace ancestral ante la autoridad de las abuelitas del pueblo kichwa cañari, matrimonio que la ONU acaba de reconocer y pedir a Ecuador que haga lo propio, lo que para el líder indígena "sienta un precedente histórico".
"Por primera vez nos pone en igualdad de condiciones a las autoridades indígenas con las estatales", valoró en una entrevista a Efe el incombustible activista y político indígena Yaku Pérez, sobre el dictamen emitido el martes por el Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de las Naciones Unidas.
Dicho Comité no solo falló que el excandidato presidencial por el movimiento plurinacional Pachakutik en las últimas elecciones de 2021 fue discriminado por las autoridades nacionales al negarse éstas a reconocer la validez de su matrimonio, sino que pidió al Estado ecuatoriano que lo inscriba en el Registro Civil.
"Para nosotros es una emancipación del yugo colonial estatal que ahora ya no vamos a requerir", señaló Pérez, al considerar que la resolución pone en valor la tradición ancestral que "milenariamente ha ido normando sobre todo" gracias a autoridades de enorme "talla moral y ética".
CONTRA LA "HEGEMONÍA ESTATAL
"El exprefecto de la sureña provincia andina de Azuay y doctor en Jurisprudencia recurrió en 2017 a ese organismo con sede en Ginebra tras comprobar cómo el Estado ecuatoriano hizo caso omiso de las normas constitucionales e internacionales, al ceñirse al código civil, algo que considera reflejo de "la hegemonía estatal".
Pérez quiso hacer valer su matrimonio ancestral para poder solicitar un visado de reunificación familiar a raíz de que su esposa, franco-brasileña, fuera expulsada del país, después de ser la pareja detenida en 2015 durante una marcha en defensa de los pueblos indígenas bajo el Gobierno de Rafael Correa (2007-2017).
Su solicitud de reconocimiento fue denegada con el argumento de que el matrimonio no era legalmente válido porque las autoridades indígenas no eran competentes para oficiarlo e inscribirlo, por lo que se solicitó que celebraran nuevamente el enlace ante funcionarios del Registro Civil.