Al menos tres centros de diversión nocturna visitaron los sicarios antes de asesinar a ocho personas en el bar El ídolo, ubicado en el barrio 12 de Octubre de la comuna Pechiche, jurisdicción de Chanduy, en la provincia de Santa Elena.

Así lo aseguraron varias personas al señalar que la camioneta blanca, doble cabina, y una moto en donde se movilizaban los criminales habrían sido vistas en otras discotecas. “Parece que los andaban buscando”, murmuró un habitante que estuvo en la escena de esta masacre que estremeció al poblado.

El crimen múltiple se produjo a la 01:30 de este sábado 11 de mayo. Tres mujeres y un joven que atendían el local se preparaban para el cierre de la jornada, pues quedaban pocas personas que libaban escuchando vallenatos. En un momento inesperado llegaron los pistoleros y sometieron a sus víctimas.

Por la forma en la que fueron encontrados los cuerpos se dedujo que la matanza se produjo de dos formas en la misma escena. A los hombres y a la administradora del negocio los sacaron del bar, los pusieron de rodillas en la calle y allí los acribillaron. A las otras dos mujeres que laboraban atendiendo a los clientes les dispararon adentro. Se presume que terminaron con sus vidas para no dejar testigos o quizás por los gritos debido al pánico generado por el momento dramático.

Tres de las víctimas son miembros de una misma familia, José y Raúl Pizarro eran padre e hijo, mientras que Milton Pizarro era hermano de José. Los tres habitaban en la población Puerto de Chanduy. También fueron acribillados Álvaro Bernabé, quien se desempeñaba como mecánico de vehículos en Chanduy, y Gilbert Armando Beltrán Silvestre, ayudante en la atención del bar.

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En la parte exterior donde fueron asesinados los cinco hombres se encontró a Estefany Choez, quien sería la administradora del bar. Los seis cadáveres presentaban tiros en la cabeza.

Mientras que a Suanni Ingrid Cruz Tuárez y Sabrina Cruz Ramírez les dispararon en el interior del local; una de las mujeres fue encontrada herida y se la trasladó al hospital Liborio Panchana de Santa Elena, pero en el trayecto murió.

El capitán de Policía Jorge Barrionuevo lamentó que ni en el local ni en las viviendas aledañas al bar hubo cámaras de videovigilancia que ayuden a confirmar la identidad de los sujetos que llegaron al lugar.

Con respecto a los vehículos usados, algunas personas decían que los criminales estuvieron en un taxi y dos motos. Pero al final el informe policial establece que solo fue una moto y una camioneta blanca doble cabina blanca.

“Ninguna de las víctimas tiene antecedentes penales”, señaló el oficial. Las primeras investigaciones apuntan a que el ataque habría estado dirigido en contra de los ciudadanos de apellido Pizarro.

En un video posteado en redes sociales por Cruz Tuárez se ve cómo las tres chicas disfrutan atendiendo a los clientes. Se las observa bailando salsa y cantando vallenatos románticos que se escuchaban en los altoparlantes.

“¡Lástima que yo no pueda ser la mujer en que tú puedas confiar!”, interpretaba a todo pulmón Suanni Ingrid. Las tres se mostraban muy felices por la buena clientela que había llegado al centro de diversión.

En la grabación también se escuchaba decir a una de las mujeres: “¡Que viva el santo!”. Lo hizo al acercarse a la mesa donde estaban los tres familiares de apellido Pizarro junto al mecánico Bernabé. Se presume que habrían estado celebrando un cumpleaños, pero los familiares de las víctimas no confirmaron.

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