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Personaje

Orgullosa exhibe su certificado de estudios en la carrera de comunicación y artes escénicas.Cortesía

Martha María Ampuero, la primera mujer con síndrome de Down que se graduó en artes escénicas

La guayaquileña de 24 años cursó la carrera de artes escénicas y es un referente de superación femenina. Nada la detiene cuando se propone objetivos.

“Todo se puede lograr, aunque sea duro el camino. Hay una estrella que alumbra el lugar, allí tenés que llegar...”, es la letra del tema ‘Todo se puede lograr’, de la cantante argentina Laura Esquivel.

La melodía es una de las favoritas de Martha María Ampuero, guayaquileña de 24 años, quien nació con síndrome de Down, condición que no ha sido un impedimento para alcanzar sus metas.

Es más, el pasado 15 de febrero fue un día inolvidable para ella y su familia, pues la universidad Casa Grande, en la cual se formó por cinco años (con todo y pandemia), le otorgó un certificado de estudios de posbachillerato en Artes Escénicas.

Ella completó el plan piloto del centro de estudios superiores, a través del cual se instruía en un programa personalizado.

Desde pequeña, Martha María ama actuar y cantar; realizaba presentaciones familiares. “Artes escénicas era solo el camino a seguir. La graduación es el resultado de sus objetivos de vida; de esa personalidad auténtica, transformada en una carrera, en un logro estudiantil”, señala Mariella, su hermana mayor (37).

Su etapa universitaria fue un desafío y un regalo. “Me encantó, fue más de lo que esperaba. De todas las materias, mi favorita fue voz y canto, porque me enseñaron varias técnicas”, cuenta la graduada, quien también recibió el premio a la resiliencia.

Con su familia, su club de fans y el motor de su vida.Cortesía

La más aplaudida

“Fue sobrecogedor. Cuando la nombraron todos aplaudían en el auditorio, reconocían su esfuerzo, gritaban su nombre”, recuerda Mariella.

Pero Martha María va por más y ahora estudiará canto. Aunque reconoce que no fue fácil, pero no es de las que ‘tira la toalla’. Cuando no da más, su secreto es relajarse, descansar y volver a intentarlo.

“Todo se puede lograr, paso a paso. Al principio es difícil concretar, pero hay que perseverar”, manifiesta la actriz.

Ella no es solo un ejemplo para las mujeres, lo es para todos, señala Martha Trujillo, su madre. “Nunca desistió, ni dijo ‘no puedo, no quiero’. Desde niña fue perseverante, disciplinada, receptiva, nos facilitó el camino”, sostiene su progenitora, quien es maestra de profesión.

En la obra ‘Dorothy en la tierra de Oz’, interpretó a la bruja buena Glinda (izq.).Cortesía

¿Quién dijo miedo?

Ha participado en tres obras de teatro: ‘Dorothy en la tierra de Oz’ (2018) y ‘Los sueños de Ani’ 1 y 2 (2019).

“Les cuento una anécdota: en la primera obra estaba repasando mi guion y me llamaron a escena. Tenía el papel en la mano, lo escondí detrás de mi espalda y salí ‘de una’ a actuar, improvisé y salió bien”, indica entre risas la joven.

Interactúa con seguidores

En su niñez, cuando Martha María hacía sus presentaciones, decía que Mariella era su asistente, papel que su ñaña ha tomado muy en serio. Tan es así que, hace cuatro años, le creó y le maneja su cuenta de Instagram @dimemarthi.

En esta red social, la joven comparte su día a día, logros, vida personal y trata de crear conciencia sobre la inclusión y el síndrome de Down.

“Fue una iniciativa familiar, ella siempre estuvo a gusto con la idea. Les habla a sus seguidores, les contesta, todo de manera natural”, menciona Mariella, quien admira lo comprometida que es su hermana, una mujer EXTRAordinaria, con una gran determinación. Un ejemplo de lucha en este Día de la Mujer.

“El esfuerzo es importante y aprender a ser feliz, también. El intento de alcanzar un objetivo no debe ser un suplicio para nadie”.Fernando Ampuero, padre
Ha participado en varios conversatorios y charlas sobre la inclusión.Cortesía
“Todos deberían saber que las personas con síndrome de Down no tienen limitaciones, pueden hacer las cosas mejor que nosotros”.Paula Lituma, actriz y excompañera de estudios
  • Síguela e inspírate
Todos en su familia admiran la perseverancia de Marthita María.Cortesía