Exclusivo
Actualidad
¡Se quedaron con las maletas hechas!
Decenas de personas intentaron salir de Quito en el feriado, pero no hubo transporte. Solo partieron flotas a Santo Domingo, pero a riesgo de que las carreteras sigan cerradas.
No fue tan complicado para Silvio Amicela conseguir un pasaje en bus para viajar a Santo Domingo, aunque el costo para salir de Quito por el feriado se incrementó en un 32 %. Como él, decenas de personas intentaron viajar desde la terminal de Quitumbe, ayer, ante la sorpresa de que casi no había flotas que operaran debido al paro nacional (aunque no hubo tantos viajeros considerando que era feriado).
Amicela reside en España y con sus hermanos se turnan para cuidar de su padre, quien vive en Santo Domingo y padece de un agresivo cáncer. “Si hubiera sabido que la situación estaba así, no habría venido en esta época”, se lamentó el ciudadano. Añadió que, de no conseguir salir de la capital (posibilidad que era real porque las carreteras empezaban a cerrarse y los transportes no se comprometían a ingresar a las ciudades de destino), buscaría la manera de hacerlo. “Aunque sea tomo un taxi. Pero tengo que irme hoy”.
Casi todas las ventanillas de ventas de pasajes estuvieron habilitadas, pero los encargados anunciaban que no tenían boletos. “No hay manera de salir, pregunte al lado”, respondió a EXTRA la encargada de una flota cuyo destino es Pedernales.
Diana Molina llegó al terminal con su esposo y su hijo, pero tuvo que regresarse ‘por las mismas’ a su casa, ubicada en el sector de la Villaflora, en el sur de Quito. “Nos estábamos yendo a Quevedo, pero no hay buses”, comentó Molina, quien se resignó a desempacar las maletas sin siquiera haber llegado a la playa.
El retorno
El problema de esta familia fue al salir de la terminal: llegaron en bus muy temprano, pero ya no había ningún transporte público para volver a casa. “Toca buscar una camioneta que cobre 50 centavos, porque el taxi cobra muy caro”, indicó Molina.
En el ingreso de la estación sur de la Ecovía, un encargado anunciaba a cuanta persona se acercaba “Solo hay T1”, indicando que la única unidad que saldría del andén llegaría solamente hasta el Seminario Mayor, en la avenida América. Decenas de personas preguntaron, ante la negativa, si algún bus llegaría hasta la Río Coca, pero el encargado se limitaba a contestar “Solo hay T1”.
Los últimos articulados de Ecovía y Trolebús rumbo a diversos puntos del norte de Quito salieron de la estación a las 09:00 y, después, se emitió una orden interna de que ya no salgan más buses. A las 10:00, ya las paradas lucían totalmente desiertas, al igual que las de buses de línea. Esto porque se preveía una manifestación en la avenida Montúfar, así que el único transporte podía llegar, a más lejos, era al Seminario Mayor.
Es por eso que varios conductores de transporte alternativo se ‘hicieron el negocio’.
Camionetas y pequeños camiones recogieron a familias enteras y cobraban 1 dólar por usuario. Margarita Guamán no tuvo otra opción: era eso o pagar unos 3 dólares de taxi hasta su casa, así que prefirió subirse al balde de una camioneta blanca con sus maletas.
Justamente en la puerta de la estación Quitumbe, varios conductores ofrecían sus servicios para trasladar a las personas a sus destinos. Mario Díaz fue uno de los clientes de estas camionetas, quien salió molesto del terminal al descubrir que el pasaje a Esmeraldas estaba costando más y el transportista ni siquiera se comprometía a llegar a su destino, en caso de que se reporten emergencias en las vías.
En los exteriores de la estación, un grupo de agentes de tránsito custodiaba el ingreso de los ciudadanos (algunos de ellos que reclamaban a los policías por la falta de transporte público). Sergio Gómez indicó a EXTRA que las decisiones de abrir o no las puertas del Trolebús y la Ecovía dependen únicamente de los mandos municipales.
“Es una decisión preventiva, porque hasta ahora no se ha registrado ningún incidente. De todas formas, hay seis motos recorriendo Quitumbe, otras ocho en la avenida Maldonado y cuatro en la calle Pérez Bustamante”, indicó.
Seguridad
En este caso de emergencia en el país, la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) habilitó el uso de los baldes de las camionetas para transportar pasajeros, cosa que en días comunes es prohibido. Gómez aseveró que la AMT se cerciora es que los pasajeros vayan dentro dentro del balde, y que no haya exceso de personas a bordo. Es lo único.
“Es un caso de emergencia y se levantó la prohibición de llevar gente en el balde porque las personas necesitan movilizarse y no hay otra manera de hacerlo. Con esto de que no ha habido buses, las personas han buscado alternativas y es nuestro deber dejar que otras personas ayuden”, comentó.