Una llamada de emergencia fue la detonante de otra masacre perpetrada en el cantón Joya de los Sachas, provincia de Orellana. Las víctimas fueron tres policías que pertenecían a ese distrito.

Este 13 de agosto se dieron más detalles sobre lo ocurrido a las 17:00 del lunes en el barrio Machala. William Villarroel, jefe nacional Antidrogas, explicó que la presencia de los uniformados en ese sector se debió a que los pobladores oyeron detonaciones de armas de fuego.

Los gendarmes supieron que un grupo armado había llegado a una casa para disparar a quienes estuvieran adentro. Cuando las víctimas arribaron a la calle B y pasaje C, se desató el infierno. “Avanzaron en uno de los patrulleros y en el sitio los atacaron con fusiles miembros de este grupo armado organizado”, comentó Villarroel.

Los asesinos también hicieron explotar granadas durante el atentado que cobró la vida del mayor Víctor Gaibor, jefe del distrito Joya de los Sachas, y de sus subalternos, los sargentos Carlos Brunis y Diego Agila, cuyos cadáveres quedaron a un lado del patrullero.

“Los individuos se movilizaban en cuatro vehículos y sería un grupo conformado por entre 10 y 15 personas”, acotó el jefe Antidrogas, designado para indagar en este caso. Sin embargo, la Policía informó que no se revelarían más datos porque se encontraban en el territorio haciendo las investigaciones.

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De forma extraoficial se difundió qué desató aquella masacre policial. El grupo que atacó a los uniformados sería colombiano: el denominado Comando de la Frontera.

Los integrantes de esta agrupación tendrían una disputa con Los Choneros, cuya presencia es fuerte en cantones como Joya de los Sachas y El Coca. El objetivo sería desplazar a estos delincuentes ecuatorianos de la minería ilegal, delito que ha generado enfrentamientos incluso con miembros de las Fuerzas Armadas durante este año de forma recurrente en El Sacha.

El general Villarroel explicó que aprehendieron a dos sujetos, que fueron identificados como Clemente Quiñónez y Luis Antonio Zambrano Moreira. Este último sería pieza clave para entender el conflicto entre los grupos criminales que se mueven en la zona.

Según un proceso judicial que reposa en la página de la Judicatura, Zambrano Moreira es parte de la agrupación terrorista Los Choneros.

Aquella revelación se hizo cuando lo detuvieron por tenencia de armas, el 18 de julio de este año. En su poder hallaron más de 100 municiones calibre 9 milímetros y 5,56. Además tenía un fusil. Sin embargo, en la audiencia de flagrancia se ordenó su liberación.

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