Exclusivo
Actualidad

Las fuertes precipitaciones se mantendrían por poco tiempo, puesto que este fenómeno habría empezado a alejarse del Ecuador.Cortesía

Inamhi: 'Yaku' no se convertirá en tormenta tropical ni en huracán

Experto del ente detalló que este fenómeno se aleja del Ecuador hacia el sur, por las costas del Perú. Se pronostica una posible llegada de El Niño.

Al igual que en Ecuador el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), el Centro Meteorológico de los Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en inglés), no clasificó al fenómeno ‘Yaku’ como un ciclón, porque este no alcanzaría las características para convertirse en uno.

Con estas entidades coincidió también el experto peruano en Meteorología Abraham Levy, quien en entrevistas a medios de comunicación de su país sostuvo que “definitivamente no vamos a tener un huracán en la costa”.

Además, ha señalado que existe una tendencia que llevará a este evento a disiparse a partir de seis o siete días. Para conocer más detalles de su parte, un periodista de Diario EXTRA lo contactó, pero por sus ocupaciones y reuniones no se concretó la entrevista.

Un ‘cicloncito’

Para aclarar este suceso, la tarde del jueves 9 de marzo de 2023, el analista y técnico en Pronóstico Meteorológico Javier Macas, del Inamhi, explicó que esta situación -de fuertes precipitaciones- ya había sido divisada y por ese motivo se habían hecho advertencias desde el 3 de marzo.

No obstante, mencionó que hubo hechos repentinos que provocaron la formación de un pequeño sistema ciclónico.

En Guayaquil se reportaron torrenciales.Christian Vásconez / EXTRA

El ‘nacimiento’

Macas detalla que una de las características que presenta este fenómeno es la circulación ciclónica. ¿Cómo nació? Él precisa que, en primer lugar, se debe a la temperatura superficial del mar, que ha ido calentando de manera progresiva desde febrero, y de forma más rápida frente a las costas de Ecuador y Perú.

Ese habría sido el ‘combustible’ que permitió formar este sistema atípico, que se completó con el paso de ondas tropicales, propias de esta región, lo que puso las condiciones atmosféricas ideales para su crecimiento.

En consecuencia, se acopló con el océano, se generó mayor humedad y el aire caliente comenzó a ascender. Esta circulación del viento sufrió cambios, al rotar en su propio eje, y alcanzó velocidades de entre 40 y 60 kilómetros por hora. Fue así que ‘Yaku’ surgió.

Fenómeno ‘patucho’

Este sistema no supera los 4 kilómetros de altura, precisa Javier Macas, mientras que en las tormentas tropicales del Caribe suelen ascender de 15 a 20 kilómetros.

Y no tiene muchas probabilidades de crecer, señala, porque debido a que está cerca la línea ecuatorial, existe la fuerza de Coriolis, que hace que el viento sea muy débil y que se esparza hacia el norte y hacia el sur.

Y, a diferencia del Caribe, en el que hay zonas que mantienen las temperaturas cálidas, en el área en la que está ‘Yaku’ no. “No se convertirá en una tormenta tropical y, peor aún, en un huracán, porque faltan más características para que siga ascendiendo”, concluye el analista.

Hacia el sur...

Este sistema atmosférico -asegura el técnico- aún generará fuertes precipitaciones en la zona centro sur del litoral ecuatoriano, pero irá disminuyendo la intensidad, porque ha empezado a alejarse hacia el sur, por la costa del Perú, y en tres días podría cambiar rumbo hacia el océano, donde no causará estragos. Pero Macas recalcó: “en las próximas 24 horas vamos a tener precipitaciones intensas (en la zona señalada)”.

Chao a La Niña, ¿y El Niño?

Expertos internacionales han publicado que ‘Yaku’ puso fin al fenómeno de La Niña y que acaba de dar paso a otro: El Niño. Sobre esto, el técnico Javier Macas coincide en la primera parte, porque el océano ha empezado a calentar y el NOAA también lo ha determinado.

El ente estadounidense también pronostica que El Niño arribaría. Ante eso, el especialista indica que es un pronóstico, pero a mediados de este año se confirmará si se han cumplido todas las características para confirmar la llegada de este fenómeno. (SCM)