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¡La ‘huesuda’ se llevó a tres de golpe en un accidente de tránsito!
Los ocupantes del automotor fallecieron en el instante. Solo se pudo reconocer al conductor. La policía revisa las cámaras de seguridad.
El guardia de seguridad que trabaja en la gasolinera de La Argelia, en la avenida Simón Bolívar, sur de Quito, fue testigo del accidente de tránsito en el que fallecieron tres personas, la madrugada de ayer.
El vigilante les contó a los policías que un vehículo negro, tipo Jeep, se había impactado contra la parte trasera de un automotor que estaba estacionado en la bomba de gasolina (y que luego se fue del lugar).
Luego del golpe, el jeep habría perdido el control y se estampó contra la pared de un domicilio que queda al lado.
Personal de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) acordonó la escena y desvió la carga vehicular por otra vía para evitar congestión, mientras esperaban al resto de unidades de emergencia.
El mayor Jorge Sánchez, director de Operaciones del Cuerpo de Bomberos, explicó que el paramédico de la primera unidad de rescate que llegó a las 03:00 constató que los tres ocupantes del automotor estaban sin vida. El golpe los mató de inmediato.
Miembros del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) levantaron evidencia de la escena y solo encontraron documentos que identificaban al conductor.
El hombre se llamaba Romel Tascano y tenía 50 años. Los otros ocupantes viajaban en la parte trasera y se trataba de una mujer, de unos 25 años, y de un adolescente, de 16, quienes no pudieron ser identificados.
Los bomberos tuvieron que utilizar maquinaria pesada para mover los fierros y retirar los cadáveres.
Los tres cuerpos fueron llevados hasta el Departamento de Medicina Legal para realizar la autopsia, mientras que el vehículo fue trasladado a los patios de retención.
El Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) solicitará al propietario de la gasolinera, que queda junto a la casa donde se impactó el auto, que le dé los videos para conocer más detalles de cómo sucedió el siniestro.
Su intención también es conocer las placas del vehículo con el que se había golpeado en primera instancia y saber por qué se fugaron del sitio si, al parecer, no tenían nada que ver.