En medio de un debate en el Senado de los Estados Unidos en el que se discutió el presupuesto que ese país destinará en el 2024 para programas a ejecutarse en el hemisferio occidental, Ecuador fue parte central de la discusión.

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En efecto, este jueves 7 de septiembre sesionó la audiencia del Subcomité de Relaciones Exteriores del legislativo estadounidense y el republicano Marco Rubio emitió una serie de declaraciones que deja en evidencia la forma en que el país del norte está viendo lo que pasa en Ecuador.

En su intervención, Rubio explicó que este año se reporta una cifra récord de migrantes venezolanos y ecuatorianos hallados en el ‘Tapón del Darién’ entre Colombia y Panamá. Además, advirtió que se espera que en las próximas 6 semanas miles de ellos lleguen en la frontera sur de Estados Unidos.

“Estoy realmente interesado en saber cómo trabajamos, no sólo con los otros países en tránsito, sino en última instancia con nuestros propios funcionarios de control de inmigración, para prepararnos para ese tipo de aumento”, dijo el legislador.

Y añadió: “Además, siempre ha habido ecuatorianos, pero no en gran cantidad como estamos viendo ahora. Es evidente que eso tiene mucho que ver con el deterioro de la situación de seguridad. Hemos visto a estos grupos de carteles colombianos ahora operando y utilizando territorio ecuatoriano como áreas de tránsito, y eso realmente se suma a eso”.

Y los recientes hechos de violencia en el país, como el magnicidio del candidato a la Presidencia, Fernando Villavicencio, sería una muestra de que las preocupaciones de Rubio no son infundadas. 

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Las autoridades capturaron a seis colombianos acusados de ser los responsables del asesinato de Villavicencio. Todos ellos tenían antecedentes en su país, por lo que no se descarta que hicieran parte de algún cartel o grupo de delincuencia organizada de Colombia.

También, la captura y asesinato de ‘capos’ ecuatorianos en tierras cafeteras durante los últimos meses hacen pensar que los enlaces entre organizaciones delictivas de ambos países se han ido fortaleciendo en la medida en que aumenta el envío de droga desde los puertos del país a Europa, Asia y Estados Unidos.

Esta es la segunda mención de la crisis migratoria ecuatoriana que surge de altas dignidades de Estados Unidos durante esta semana.

El alcalde de Nueva York, Eric Adams, expresó su profunda preocupación ante lo que considera una creciente crisis de inmigración que amenaza con impactar limitadamente a la ciudad que nunca duerme. En una rueda de prensa, Adams hizo hincapié en la magnitud del problema y la falta de soluciones claras.

“Nunca en mi vida tuve un problema al que no le viera el final. No veo una solución a esto. Este problema destruirá la ciudad de Nueva York”, declaró el alcalde, visiblemente preocupado por la situación actual. Según sus declaraciones, la ciudad está recibiendo alrededor de 10.000 migrantes al mes, procedentes de diversas partes del mundo, incluyendo Venezuela, Ecuador, México y África occidental.

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