Exclusivo
Drama
¡Epifanio, no estás solo!
Entidades públicas toman el caso del hombre indocumentado y gestionan los trámites que lo legalizarían como ciudadano
Hace dos días nadie conocía la historia de Epifanio Branda Quiñónez, un hombre de 58 años, cuyos padres nunca lo inscribieron al nacer, descuido que le dificultó la atención médica en hospitales públicos. Hoy una patología hepática, la cirrosis, se le transformó en cáncer y los galenos lo desahuciaron.
Posterior a nuestra publicación, Diario EXTRA estableció contacto con autoridades del Registro Civil, y el licenciado Andrés Fantoni, coordinador Zonal 8, del Registro Civil, Identificación y Cedulación, indicó que una vez conocido el caso del señor Epifanio, como institución se contactaron con su familiar para encaminar las acciones respectivas, una de ellas, es enviar una brigada de inscripción y cedulación a la casa del ciudadano. También se contempla asumir los valores del documento de identidad por parte de la entidad.
“La institución realizó un acercamiento con la Defensoría del Pueblo para que a través de su intermedio puedan efectuar las gestiones con la Defensoría Pública o con la institución que ellos consideren pertinente a fin de que se patrocine la causa y tener la sentencia a fin de poder inscribir al señor Epifanio”, señaló Fantoni, quien hace hincapié que el caso de tío Pijo es una inscripción de nacimiento de un mayor de edad y se debe realizar por la vía judicial, tal como lo indica la Ley Orgánica de Gestión de la identidad y datos Civiles (Logidac).
Personal del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) también se comunicó con nuestro Diario para ayudar a don Epifanio.
Presunta estafa
Carmen Segura, sobrina de tío Pijo, comentó que ha recibido llamadas de personas generosas, pero también inescrupulosas por el caso.
“Un hombre llamado César Freire Loaiza me timbró y me dijo que una empresa de cemento donaría 745 dólares, y necesitaba mis datos personales. Emocionada se los di, pero luego me indicó que tengo que depositar 40 dólares a nombre de Carlos Danilo Martínez Álava. Con ese dinero me abrirían una cuenta en la cual estaría la donación”, relató la mujer y afirmó que iba a empeñar su cédula para obtener el valor.
Luego decidió ir a la empresa cementera y confirmó que Freire no labora allí y que la fábrica no hace contribuciones de ese tipo. Carmen está preocupada por la información que proveyó, dijo que lo reportará a la Policía y al banco.