Exclusivo
Actualidad

Las condiciones climatológicas en la ciudad contribuyeron a que la propagación de incendios forestales se extienda hasta finales del mes de octubre.

Atención a conatos de incendio aumentó este año en Quito

Desde el pasado mes de julio, el Cuerpo de Bomberos de Quito ejecutó del Plan de Prevención y Respuesta a Incendios Forestales, en coordinación con la Secretaría de Seguridad y Gobernabilidad del Municipio de Quito y otras entidades responsables del ap

Desde el pasado mes de julio, el Cuerpo de Bomberos de Quito ejecutó del Plan de Prevención y Respuesta a Incendios Forestales, en coordinación con la Secretaría de Seguridad y Gobernabilidad del Municipio de Quito y otras entidades responsables del apoyo y ejecución.

Según informó la entidad, el plan se ejecutó en 5 fases como el análisis de riesgo, prevención y mitigación, detección y monitoreo, preparación para la respuesta, y respuesta operativa; que contaron con el despliegue de recursos humanos y tecnológicos para el control y liquidación de conatos e incendios presentados en la zona urbana y en las áreas rurales de la ciudad.

En el balance de estas atenciones se enfatizó que las condiciones climatológicas registradas en la ciudad contribuyeron a que la propagación de incendios forestales se extienda hasta finales del mes de octubre, así como la localización de los incendios forestales de magnitud que se registraron en zonas de difícil acceso para el personal operativo como cerros, quebradas y laderas, haciéndose necesario el apoyo de las operaciones aéreas para transporte de personal y combate a los incendios.

En comparación con el año anterior, existe un aumento en la atención de conatos e incendios forestales de nivel I y II, con un total de 2 466 eventos atendidos, lo que representa un aumento del 95% de siniestros relacionados con fuego forestal.

En contraparte, hubo una disminución de la cantidad de áreas afectadas. En total, 849,14 hectáreas se afectaron por incendios forestales durante la época seca de este año, lo que muestra una reducción del 6% de zonas alcanzadas por el fuego, comparadas con las 905,22 hectáreas que resultaron quemadas durante el 2017.

En el informe se destaca además que de los 11 incendios forestales de nivel 3 (superiores a 10 hectáreas) fueron originados por actos inseguros como quemas agrícolas, de vegetación seca y actividades de cacería silvestre. Acciones iniciadas por la mano del hombre en áreas donde la presencia de vientos fuertes y pastizales con baja carga de humedad coadyuvan para la propagación del fuego. Por los que las zonas más afectadas por incendios forestales de magnitud de este año se registraron en las zonas rurales del cerro Atacazo, Rucu Pichincha, Puembo, Cerro Ilaló y Tababela.