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Colombia y Ecuador acordaron abrir sus fronteras desde el 1 de diciembre
La medida está enfocada en potenciar el comercio y la movilidad entre naciones
Luego de tres horas de reunión, los presidentes Iván Duque, de Colombia, y Guillermo Lasso, de Ecuador, anunciaron los primeros acuerdos de la reunión bilateral mantenida este domingo 21 de noviembre de 2021.
En una declaración conjunta, Duque anunció que desde el 1 de diciembre se abrirán las fronteras con Colombia, que se mantenían cerradas desde que comenzara la emergencia sanitaria, en marzo de 2020.
La decisión está enfocada en potenciar el comercio, la movilidad y sobre todo el traslado de mercadería.
En julio pasado, los conductores de carga pesada internacional protestaron por el cierre de la frontera. Los transportistas pidieron al gobierno que gestione con la Cancillería de Colombia, con el fin de se levanten las medidas restrictivas al transporte de mercadería entre los dos países.
"Al abrir las fronteras ninguna familia tendrá que pagar la extorsión de ninguna banda de delincuentes que les cobran por el paso por vías alternas", explicó Lasso.
La frontera común, de 586 kilómetros, permanecía cerrada al paso de personas desde mediados de marzo de 2020, lo que ha generado todo tipo de actividades ilícitas y la instauración en la zona de bandas de tráfico de personas que ayudaban, mediante pago, a cruzar el límite fronterizo.
Sí se permitía el paso de mercancías mediante un mecanismo de entrega en frontera, aunque en la reunión de hoy Lasso y Duque acordaron que los transportistas podrán cruzar al otro lado.
Duque subrayó que el facilitar el ingreso de los transportistas es "un mensaje a la continuidad de la conectividad entre nuestras naciones", y marca "la recomposición y el retorno a lo que son, y deben ser, las relaciones de competitivad y de comercio, para darle dinamismo a la reactivación" económica tras la pandemia.
Duque manifestó, además, que Colombia "brindará todo el apoyo total e irrestricto de asesoría, acompañamiento y de integración" a nivel de organismos de seguridad para lidiar con la situación y "seguir enfrentando enemigos como el narcotráfico y el terrorismo".
La crisis en Ecuador se ha reflejado en un incremento de los asesinatos en las calles, pero sobre todo en una serie de matanzas en penitenciarías que, según el Gobierno, se origina en la rivalidad entre bandas vinculadas al narcotráfico y el crimen organizado.