Exclusivo
Actualidad
Caso Letty Cando: las huellas que el presunto asesino no logró borrar en la escena del crimen
La policía habló con un vecino, quien habría visto cómo el sospechoso del crimen lavaba un colchón con manchas de sangre
Los familiares de Letty Cando ratificaron que los restos humanos encontrados bajo tierra en el parque Guangüiltagua, la mañana del 9 de septiembre, le pertenecían a ella.
Sus dos hermanos identificaron los tatuajes que tenía la farmacéutica, de 33 años, marcados en sus antebrazos. Alberto Cando se aguantaba las ganas de llorar. Anhelaba que su ñaña todavía siguiera con vida.
(Lea también: Nueva matanza en el Guasmo sur, un abuelito entre las víctimas )
Ahora tendrá que decidir si enterrarán los restos o los cremarán. Por lo pronto, deben esperar hasta el lunes 11 de septiembre para que les entreguen las piezas humanas desde la morgue porque, según el fiscal que lleva el caso, todavía deben hacer más pruebas médico-legales y confirmar si la mujer fue abusada sexualmente antes de ser acuchillada por Johnny Caiza, principal sospechoso del crimen y quien recibió prisión preventiva.
Evidencias irrefutables
La abogada de la familia mencionó que los cortes que hizo el sospechoso para desmembrar el cuerpo eran perfectos y quieren indagar, durante la instrucción fiscal, si el sujeto habría cometido otros crímenes bajo la misma modalidad.
Desde la Fiscalía informaron que Letty salió con una amiga a una fiesta la noche del 2 de septiembre y entabló una relación amistosa con Johnny Caiza, a quien conoció a través de terceras personas.
Bebieron en una discoteca hasta que el sospechoso ofreció su casa para continuar con la rumba, en Bellavista, en el norte de Quito.
La víctima y otras tres personas aceptaron la invitación. Sin embargo, luego de unas horas, estas últimas se marcharon y la farmacéutica se quedó dormida en una habitación.
La madrugada del 3 de septiembre habría ocurrido el crimen. Caiza la habría apuñalado hasta matarla. Luego cortó su cuerpo en pedazos y en fundas los habría llevado hasta el bosque donde los enterró.
Al siguiente día, los familiares de la víctima denunciaron su desaparición, luego de que los jefes del centro de salud donde trabajaba les informaran que no fue a laborar.
Los investigadores hablaron con la amiga con la que salió Letty y ella les indicó que la última vez que la vio fue en la casa de Caiza. Interrogaron al sospechoso, pero este se les hizo el ‘loco’ y pretendía confundir a los policías. Sin embargo, estos encontraron el celular y la cartera de la víctima cerca de la casa del sospechoso.
Además, hablaron con un vecino, quien vio a Caiza lavar un colchón con manchas de sangre y trapear el piso de su habitación, que también tenían las mismas huellas. El detenido será investigado durante 90 días por la Fiscalía.
¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!