“Aquí está la porquería de colegio que permite tantas injusticias. Mi hermana se quitó la vida por bullying (acoso) y todos (los docentes) lo sabían”, gritaba Fernanda en el patio del colegio de su hermana, una estudiante de 14 años de un plantel ubicado en la Cooperativa Sergio Toral, en Guayaquil, quien se quitó la vida el pasado 18 de septiembre.

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La escena fue capturada por Fernanda en una transmisión en vivo en su cuenta de Facebook, en la que, entre sollozos, expresaba el dolor por la repentina muerte de su ñaña. Su ira, sin embargo, era aún mayor, pues en el video relató que dos compañeras encerraban a su hermana en el baño para golpearla.

Días después, la madre de la menor de edad, aún devastada, dio una breve declaración a un medio local, asegurando el acoso que sufría su hija. Aunque EXTRA la contactó, prefirió no hablar más del tema; a más de un mes de su pérdida, el dolor sigue latente.

Fernanda, en nombre de la familia, mencionó a este Diario que solo pedían a la institución y a las autoridades apoyo psicológico para su hermano menor, quien también estudia en el mismo plantel y ha sido profundamente afectado por la muerte de su hermana. Sin embargo, aseguró que hasta la fecha no habían recibido respuesta.

En contraste, el departamento de comunicación del Ministerio de Educación indicó a EXTRA que “sí se asignó ayuda psicológica del Departamento de Consejería Estudiantil para brindar acompañamiento socioemocional, tanto al hermano de la niña como a su madre, mediante un plan de atención psicosocial”.

El distrito educativo continúa con la investigación y promete “garantizar que, de hallarse algún acto negligente, se aplique el debido proceso sancionatorio”.

En Guayaquil, según cifras de esta cartera de Estado, se han registrado cinco casos de acoso escolar en todo el distrito. Sin embargo, la subsecretaria de la Zona 8 del Ministerio de Educación, Daniela Febres Cordero, informó a este Diario que existen 500 departamentos de Consejería Estudiantil (DECE) en la zona 8, preparados para abordar estas problemáticas en las instituciones públicas.

“El DECE capacita a los estudiantes para prevenir este tipo de incidentes mediante conversaciones con ellos, directivos y padres, quienes deben aprender a identificar signos de depresión en sus hijos para poder apoyarlos”, comentó.

Para reforzar esta situación, con un presupuesto de alrededor de 5 millones de dólares, la prefecta del Guayas, Marcela Aguiñaga, informó que 40 escuelas fiscales en la provincia serán intervenidas a través del programa ‘Protegiendo Vidas’, con el fin de “erradicar la violencia”.

Jhon Jairo Morán, coordinador de educación de la fundación ChanGo, involucrado en este proyecto, explicó que se proporcionarán herramientas pedagógicas a los docentes para erradicar el acoso escolar en centros educativos ubicados en zonas conflictivas. “Se implementarán juegos cooperativos que los docentes podrán replicar con los estudiantes para fomentar el respeto y la colaboración, además de otras estrategias”, explicó Morán.

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