Los disparos que resonaron a las 5:00 de la madrugada de este domingo 8 de septiembre sobresaltaron a los habitantes de la cooperativa Una Sola Fuerza 2, en Durán. El eco de las detonaciones se extendió por el vecindario, pero el miedo paralizó a los moradores, quienes evitaron salir de sus casas por temor a convertirse en víctimas de las balas.

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Pasaron dos horas antes de que un residente se atreviera a asomarse y descubriera, en medio de la calzada polvorienta, el cuerpo sin vida de un hombre. A su lado, yacía una gorra roja que pertenecía a la víctima.

El fallecido, conocido en la zona, habría intentado escapar de sus agresores, quienes, después de perpetrar el violento ataque, se dieron a la fuga en una motocicleta, según el testimonio de algunos vecinos.

"Escuchamos como si alguien corría, pero nadie salió por temor a que algo nos pasara. El fallecido vivía a unas pocas cuadras de aquí", contó un vecino, que prefirió mantenerse en el anonimato por miedo a represalias.

Cerca de las 8:00 de la mañana, personal de Medicina Legal llegó al lugar para levantar el cuerpo, que fue trasladado al Laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses de Guayaquil para las investigaciones correspondientes.

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