Buena Vida
¡Cuidado! hay verdades que pueden ‘atropellar’
El problema no es la sinceridad, sino que alguien la exprese sin el más mínimo tacto y empatía. Recibirla de esta manera puede lastimar a quien la oye
Buena Vida
El problema no es la sinceridad, sino que alguien la exprese sin el más mínimo tacto y empatía. Recibirla de esta manera puede lastimar a quien la oye