El sector turístico de Manta, Manabí, atraviesa una profunda crisis debido a los constantes apagones que afectan al país. Los cortes de energía, que en las últimas semanas han llegado a durar entre 10 y 14 horas, han asestado un duro golpe a la industria sin chimeneas de esta ciudad costera.

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Las pérdidas económicas son cuantiosas. Numerosos negocios, incapaces de adquirir generadores eléctricos, se han visto obligados a cerrar sus puertas temporalmente. Otros han tenido que reducir su plantilla de empleados.

Paúl Andrade, presidente del Buró Turístico de Manta, lamenta las graves consecuencias de esta crisis eléctrica. Señala que el sector turístico ha recibido golpe tras golpe, enfrentando desafíos como la pandemia, paros nacionales e inseguridad.

"En Manta, se estima una pérdida de 500.000 dólares diarios solo en el sector turístico. Si sumamos a todo Manabí, la cifra sería mucho mayor", lamentó Andrade.

En cuanto a las reservas hoteleras, Andrade detalló que el sector hotelero es uno de los más afectados. Las ventas han disminuido en un 50 % en comparación con lo habitual.

"Las reservas para fines de semana y feriados, que son los períodos de mayor actividad, han caído entre un 50 % y un 80 %. Considerando que estamos en temporada baja, el impacto es aún mayor", explicó el dirigente.

Washington Intriago, propietario de un edificio de departamentos turísticos, confirmó esta situación. Muchos de sus clientes habituales han cancelado sus reservas debido a los problemas con el suministro eléctrico.

"Estamos sumamente golpeados. Esas 14 horas sin electricidad son un duro golpe para el turismo", expresó Intriago.

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