En escombros quedaron las horas de ‘camello’, sudor del sacrificio y la mercadería de tres familias de comerciantes. Una explosión los dejó sin sus negocios y con deudas que los ‘ahorcan’.

En la calle Bolívar y Santistevan, en pleno corazón comercial del cantón de Jipijapa, en el sur de la provincia de Manabí, el panorama es devastador.

En ese lugar, a las 02:30 de este lunes 18 de septiembre de 2023, se inició una pesadilla para Rubén Giraldo, de nacionalidad colombiana.

Él es propietario de la panadería que fue el epicentro de la explosión que estremeció a la barriada.

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El extranjero dijo que unas dos horas antes estuvo trabajando en el local. “Si me quedaba dos horas más, estuviera ahora acostado y muerto allí adentro. Estuve dejando listo unas cosas y me fui a descansar”, dijo el propietario de la panadería, que llevaba 18 años de atención en Jipijapa.

Por el desastre, las pérdidas materiales aproximadamente estarían entre los $ 15.000 y $ 20.000. Había electrodomésticos, vitrinas, repisas, tortas, postres, panes, letreros y demás.

“Esto no tiene nada que ver con explosión de gas. Los bomberos sacaron las 3 bombonas intactas. Eso se tiene que investigar de manera profunda a ver qué sucedió. No sabemos qué hacer, este era el sustento de mi familia”, expresó el hombre mientras recibía respaldo de sus clientes y amigos.

Giraldo dijo que él no ha recibido ninguna amenaza, sin embargo, espera que todo se aclare. Asimismo, anhela tener una mano solidaria de las autoridades y la ciudadanía para reponerse de este nefasto episodio y volver a levantarse.

Al lado de la panadería había un negocio de calzado y joyas. Los propietarios lloraban mientras veían que la maquinaria removía las ruinas. En medio de los pedazos de paredes ellos recogían aretes, anillos y cadenas. La escena era triste y conmovedora.

Los trabajadores del Cabildo de Jipijapa ayudaban en el movimiento de desechos y depositaban lo que aún servía en unos sacos. En medio de todo ese devastador momento, encontrar algo intacto les sacaba una sonrisa.

Gonzalo Quiroz, representante de una farmacia, indicó que ellos también resultaron afectados con la puerta de ingreso que resultó afectada. En medio de esta desgracia, lamentó, que haya personas que quisieron ingresar al local para sustraerse producto. Afortunadamente, hubo personas en la madrugada que ahuyentaron esa acción indolente.

En la parte superior del edificio, los vidrios de un consultorio odontológico también resultaron destrozados. Esto también ocurrió en una vivienda adyacente. Su propietaria barría en el balcón los vidrios ante la mirada de temor e incertidumbre de la ciudadanía.

La onda expansiva de la explosión tuvo un radio de 20 metros. Doce bomberos llegaron a apagar el fuego que se estaba iniciando en la panadería.

El capitán Miguel Fuentes, del Cuerpo de Bomberos de Jipijapa, explicó que la explosión se dio desde la parte interna del edificio hacia afuera y eso provocó que las puertas de los locales salieran disparadas.

“Las tres bombonas de gas están intactas. Nuestros peritos e inspectores se encuentran indagando, recogiendo indicios. Tenemos un avance de investigación del 80 %. Se brindará un informe con nuestro superior posteriormente”, dijo Fuentes.

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