El excabo de policía, Cristhian Jaramillo Quimí, de 46 años, quien fue encontrado sin vida la tarde del lunes (28 de agosto), dejó cinco hijos menores de edad huérfanos de padre. La víctima residía con su familia en el barrio Alberto Spencer en la ciudad de Santa Elena.

El día de su muerte, Jaramillo Quimí estuvo en casa hasta las 14:00 cuando recibió una llamada a su teléfono móvil. De inmediato salió a encontrarse con la persona con la que habló y poco tiempo después sus allegados se enteraron que el cuerpo del exuniformado fue hallado en un terreno baldío ubicado en lo alto del cerro El Tablazo, en las inmediaciones del barrio Pacífico.

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El celular del occiso es clave en la investigación, pero los gatilleros, que le asestaron 14 tiros, se lo llevaron. La billetera es otra de las pertenencias del exgendarme que hacen falta.

Jaramillo fue separado por dos ocasiones de la institución uniformada. Se lo acusó de mala conducta y por ello le dieron la baja. Él había planteado un juicio a la institución uniformada para poder regresar, pero quedó en nada.

Los peritos policiales presumen que el crimen de Jaramillo Quimí podría estar relacionado con el asesinato de José Chóez, conocido como El Manaba, ocurrido el 6 de febrero del 2022 en las afueras de un centro de diversión nocturna, propiedad del expolicía.

“A diario siguen los crímenes en la provincia. Es muy lamentable que en la península se haya perdido la tranquilidad. No vemos acciones efectivas de las autoridades. ¡Hasta cuándo tanta violencia criminal!”, reclamó un morador. 

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