La jornada electoral de la Consulta Popular 2024 en Esmeraldas comenzó con un obstáculo inesperado: la naturaleza. Las intensas lluvias y las resultantes inundaciones han tenido un impacto significativo en la asistencia de votantes a los recintos electorales de la provincia de Esmeraldas.

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Desde las primeras horas de la jornada, las precipitaciones han sido constantes en los cantones Muisne, Esmeraldas, Quinindé y Rioverde, lo que ha provocado el desbordamiento de ríos, deslizamientos de tierra y la inundación de calles y avenidas, dificultando el acceso a los centros de votación.

En Muisne, por ejemplo, los más de 5000 habitantes de las parroquias Sálima y San Gregorio se encuentran aislado a causa de las inundaciones provocadas por el desbordamiento del río Sálima. El 80% de las personas de esta zona que están habilitadas para sufragar están empadronadas en Muisne.

“Estamos inundados y así no podemos salir a sufragar, sabemos que eso representa una multa, pero no podemos dejar botada nuestra casa y nuestros animales, porque corremos el riesgo de que se lo lleve el agua”, aseguró Iván Murillo, afectado por las inundaciones.

Una situación similar se vive en el cantón Rioverde, donde un deslizamiento de tierra tapó la carretera que conecta con el norte de la provincia, a la altura del Centro Deportivo de Alto Rendimiento. “Quienes íbamos a votar al norte, a Borbón, a San Lorenzo, ya perdimos el viaje y de paso nos tocará pagar multa”, dijo Segundo Quiñónez, quien viajaba de Esmeraldas a San Lorenzo para sufragar.

A pesar de los esfuerzos de las autoridades locales para mantener los caminos transitables, la afluencia de votantes ha disminuido notablemente en comparación con jornadas electorales anteriores.

“Coordinamos con la municipalidad de Rioverde para entrar con maquinaria y abrir la vía y permitir que los ciudadanos puedan despasarse a los sitios donde les toca sufragar”, aseguró Javier Buitrón, gobernador de Esmeraldas.

Los ciudadanos de Esmeraldas, conocidos por su resiliencia y compromiso cívico, se han visto forzados a sopesar los riesgos de salir de sus hogares para ejercer su derecho al voto. Algunos han logrado llegar a los recintos electorales, mientras que otros han optado por permanecer en casa, priorizando su seguridad ante las adversas condiciones climáticas.

La Consulta Popular de este año, que incluye temas cruciales como la seguridad y el empleo, es un evento de gran importancia para el futuro del país. Sin embargo, la naturaleza ha recordado a los ecuatorianos que, a pesar de la importancia de la participación democrática, hay factores fuera del control humano que pueden influir en el proceso electoral.

Las autoridades electorales y gubernamentales están monitoreando la situación y buscando soluciones para garantizar que todos los ciudadanos tengan la oportunidad de votar. Mientras tanto, la comunidad espera que las condiciones mejoren y que la participación ciudadana no se vea comprometida por completo debido a este desafío climático.

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