Exclusivo
Provincias
Esmeraldas: Con la inundación del río Teaone, varias familias revivieron una pesadilla
En uno de los barrios más populares, 50 Casas, volvieron a perder sus enseres por la fuerza de la naturaleza
Elvira Mina, Juan Camacho y Laura Cortez viven una similar calamidad. Los tres residen en el barrio 50 Casas, uno de los más afectados por la inundación del río Teaone, en Esmeraldas, que en la madrugada del martes 30 de enero de 2024, fue arrastrando todo a su paso: árboles, vehículos, animales, basura e inundó casas.
Los tres moradores ya habían sufrido algo parecido en junio de 2023, cuando el mismo río se desbordó y les arrebató sus bienes. Aquella vez perdieron cocina, lavadora, colchones, muebles y otros enseres. Esta vez, el agua subió 1,80 metros en las zonas más altas y hasta 2 metros en las más bajas.
(Te invitamos a leer: Arcotel permite la consulta de IMEI para combatir la comercialización ilegal de teléfonos)
“No tuvimos tiempo de salvar nada, solo de salir corriendo con nuestros hijos y buscar un lugar seguro. El agua nos llegaba hasta las rodillas... Fue una noche de terror”, relató Elvira Mina mientras sacaba, con baldes, el agua y lodo de su casa.
El año pasado, ella y los otros vecinos debieron empezar de cero, con ayuda de sus familiares, amigos y algunas organizaciones solidarias. De a poco habían logrado recuperar algo de lo perdido, pero no habían podido olvidar el trauma de aquella noche.
Y la tragedia volvió a tocarlos el martes 30 de enero de 2024, cuando el río Teaone se salió de su cauce e inundó más de 26 barrios de la ciudad.
Elvira, Juan y Laura vieron con horror cómo el agua entraba en sus casas y les quitaba nuevamente lo que tanto les había costado obtener. No tuvieron tiempo de salvar nada, solo de salir corriendo con sus hijos y buscar dónde refugiarse.
“Es la segunda vez que nos pasa esto. En junio del año pasado también perdimos todo por el desbordamiento del río. Habíamos empezado a recuperar algo, pero ahora volvimos a quedarnos sin nada”, aseguró Juan Camacho mientras veía con nostalgia su casa llena de lodo.
(No te pierdas: En la Penitenciaría del Litoral se escondían armas hasta tras las paredes)
Los tres vecinos se encontraron en una de las calles principales de este popular barrio del sur de Esmeraldas, y sobre el lodo se abrazaron y se consolaron. No podían creer que les hubiera tocado vivir otra vez esa pesadilla. No sabían qué iban a hacer, cómo iban a reconstruir sus vidas, dónde iban a dormir... pero también se sentían agradecidos de estar vivos, de tenerse los unos a los otros, de contar con el apoyo de vecinos y de personas solidarias.
La mañana de este miércoles 31 de enero de 2024, muchos moradores amanecieron sacando lodo y agua de sus viviendas, tratando de recuperar parte de sus enseres.
¿Quieres estar bien informado? ¡Suscríbete aquí!