“¿Por qué me dejaste? ¿Cómo voy a soportar este dolor, Dios mío?”, expresó entre lágrimas Cecilia Chila, tratando de asimilar la muerte de su hijo, Miguel Javier Solís Chila, de 23 años. Su cadáver fue encontrado la mañana de este jueves en el sector Corral Viejo de la parroquia Pimocha, en el cantón Babahoyo, Los Ríos. Cecilia estaba trabajando cuando le informaron lo ocurrido y de inmediato acudió a la morgue para identificarlo.

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La policía informó que el cuerpo de Solís Chila fue localizado por los habitantes de esa zona rural, quienes inicialmente no lo reconocieron. El cadáver, encontrado junto a unas plantaciones de maíz, presentaba varias heridas de arma de fuego.

Una vez en la morgue, la pareja menor de edad del difunto logró reconocerlo por los tatuajes. La joven de 17 años, quien está embarazada de dos meses, mencionó a la policía que su marido salió la tarde del miércoles a hacer fletes en su moto. Sin embargo, al llegar la noche y ver que no volvía, pensó que estaría en casa de su madre.

Cecilia comentó que esa tarde vio a su hijo y hasta le dio $5 para arreglar la motocicleta. “Él siempre me decía ‘mami, vas a llorar por mí’, pero yo le repetía que debía ser la primera en morir para no quedarme sola”, recordó.

Sentada en la banqueta, Cecilia no dejaba de llorar por la pérdida de su hijo. Sus familiares y amigos se acercaban a darle las condolencias, pero ella solo pedía verlo para estar segura de que realmente había fallecido.

En medio de este trágico suceso, nadie sabe del paradero de la motocicleta ni las circunstancias exactas del crimen. Los agentes continúan investigando en la parroquia El Salto, donde vivía la víctima con su familia.

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