En Loja, un reciente operativo policial dejó al descubierto un preocupante hallazgo: jeringuillas cargadas con alcohol listas para ser inyectadas directamente en el torrente sanguíneo. Aunque no se detuvo al extranjero que presuntamente comercializaba estas sustancias, las autoridades confiscaron el material y le impusieron una multa equivalente a un salario básico. Sin embargo, no se ha presentado ninguna denuncia formal en la Fiscalía en contra del implicado.

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El comandante de Policía de Loja, Carlos Ortega, advirtió sobre los riesgos irreversibles para la salud que puede generar esta peligrosa práctica. Aunque no se han reportado casos de personas afectadas por inyectarse alcohol, la Policía anunció que intensificará los operativos durante las festividades de diciembre para prevenir la venta y el consumo de esta sustancia. “Cualquier persona encontrada comercializando o consumiendo será detenida para las respectivas investigaciones”, aseguró Ortega.

Preocupación en las instituciones educativas

El hallazgo de estas jeringuillas ha generado alarma en las unidades educativas y universidades de la localidad. Diego Falconí, subdirector de Seguridad y Salud Ocupacional de la Universidad Nacional de Loja (UNL), informó que la institución ha reforzado las medidas de control. “Contamos con un reglamento que prohíbe el consumo de bebidas alcohólicas y otras sustancias sujetas a fiscalización dentro de la universidad. Ante este hallazgo, hemos incrementado la vigilancia para evitar el ingreso de estas jeringuillas y bebidas alcohólicas”, explicó Falconí.

Además, la UNL ha solicitado apoyo a la Intendencia de Policía para que se realicen controles en bares y locales cercanos a los campus universitarios. La universidad también ha implementado un plan de rehabilitación para estudiantes que puedan enfrentar problemas de alcoholismo, aunque hasta el momento no se han detectado casos relacionados con el uso de estas jeringuillas.

Las autoridades instan a la ciudadanía a denunciar la venta de estas sustancias y a mantenerse alerta ante prácticas que pongan en riesgo la salud pública. Con el fortalecimiento de operativos y la cooperación de las instituciones, esperan prevenir que esta situación se convierta en un problema mayor.

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