Un documento que circuló en redes sociales alarmó a todo aquel que lo tuvo al frente. Era el supuesto anuncio de que en Quito se empezarían a cobrar las temibles ‘vacunas’.

El escrito se lo atribuían tres bandas criminales y decían que la “cuota de guerra” se recogería en sectores del sur como Guamaní, Chillogallo, Quitumbe. En zonas del norte como Carapungo o Cotocollao.

Los montos variarían dependiendo del ingreso, advirtieron. Mientras que en puntos como Los Valles de Tumbaco, Cumbayá o San Rafael, la gente con mayores posibilidades económicas darían más dinero. ¡Increíble!

La Policía salió al paso a decir que la información era falsa, pero ¿se investigó quién originó aquel alarmante anuncio?

La capital está experimentando lo que ya se vive en Guayaquil desde hace un par de años, donde los criminales de ‘poca monta’ se tomaban el nombre de bandas ‘pesadas’ para pedir plata. Parece que nadie ‘paró bola’ hasta que en la actualidad es un mal incorregible.

Está en manos de las autoridades el desbaratar, a tiempo, esto que a los quiteños ya les quitó la tranquilidad. Los dirigentes políticos y la Policía tienen que identificar quiénes son esos pelafustanes que, por ahora, no están causando más que miedo en la gente buena de la Carita de Dios. ¿O acaso no les da la gana?