Vuelve de a poco la incertidumbre ciudadana tras la aparición de la nueva variante del COVID-19 y nuevas medidas fueron establecidas por el COE Nacional a partir del decreto de estado de excepción focalizado que va del 14 al 28 de julio del 2021 aprobado por el presidente Lasso.

El objetivo principal es evitar aglomeraciones para tratar de crear un cerco epidemiológico y evitar el rápido contagio entre personas. En el caso de Guayaquil se determinó un aforo del 50% en lugares cerrados, 75% en espacios al aire libre y 50% lo que refiere al transporte público. En la provincia de El Oro se estableció toque de queda a partir de las 20:00 hasta las 06:00, de lunes a viernes, y fin de semana desde las 18:00 hasta las 06:00, teletrabajo obligatorio tanto en lo público y privado, aforos reducidos al 25% en todos los establecimientos que presten atención al público, suspensión de clases presenciales, aforos en el transporte de un 30% y suspensión del transporte interprovincial, entre las más importantes.

Se repiten las recetas de meses anteriores en busca de frenar la propagación de la variante delta y delta plus, y a su vez el Gobierno Nacional y el Ministerio de Salud Pública redoblan esfuerzos para que los procesos de inoculación sean más acelerados, eficientes y abarcadores.

En Guayaquil, la alcaldesa Viteri dispuso habilitar nuevos puntos de vacunación y estimular la asistencia por medio de canastas de víveres tanto para los que reciben la primera y segunda dosis. Asimismo, se piensa exigir en un corto plazo que todos los ciudadanos porten su carnet de vacunación para el ingreso de establecimientos. Ya hay críticas, pero si esto empeora veremos qué dicen.