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Opinión

...¿Y quién podrá defendernos?...

Si el Chavo del 8 estuviera vivo, diría “Yo, el Chapulín Colorado”,...Pero la situación del país luego de un terremoto y lluvias implacables tiene ahora un panorama nada agradable.

Pensemos con optimismo que los aguaceros diluviales están por terminar, pero su saldo negativo es impactante. Las carreteras en Costa, Sierra y Oriente han sido afectadas a más no poder. Los cerros virtualmente se han venido abajo y con esto no solo que alteraron el curso de ríos, sino que hicieron desaparecer zonas de cultivo y acabaron con viviendas en donde muchas personas moraban.

La parte agrícola está my afectada y los labriegos se abstienen de iniciar cultivos rentables porque momentáneamente no pueden sacar al mercado sus cultivos; las cosechas son para consumo interno y poco es lo que queda para la exportación. Además, tenemos deudas por miles de millones de dólares en obras que no están terminadas y, en consecuencia, no rinden los frutos esperados.

Una planificación serena, pero activa es necesaria. Primero, la reconstrucción de carreteras para evitar el aislamiento de muchas zonas. Luego respaldar a las agrupaciones de agricultores que cultivan productos de exportación y que tienen aceptación en el exterior.

¿Nuevos préstamos...? Pero pensemos que hay que pagarlos, y tenemos aún pendientes millonadas por montones. ¡Y a qué intereses!...