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Parientes de los internos buscaban conocer alguna información de sus allegados, pero los policías no les permitían acercarse a la entrada del centro carcelario.Christian Vásconez / EXTRA

Vigilia en la Penitenciaría del Litoral: Incidentes dejan policías y reos heridos

Este miércoles ocurrió una nueva reyerta en el centro carcelario, en el norte de Guayaquil. Disparos y detonaciones desde adentro provocaron alerta.

En el exterior del Centro de Rehabilitación Social de Varones N. 1 de Guayaquil, más conocido como la Peni, se repitió el drama de otras veces: lágrimas y desesperación de familiares de personas privadas de libertad (PPL), al no saber nada de ellos, debido a una reyerta entre integrantes de organizaciones criminales.

El ‘paniqueo’ empezó pasadas las 13:00 de este miércoles 5 de octubre. Parientes de PPL se comunicaron con el Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos, para expresar su preocupación luego de conocer que del interior del centro carcelario, ubicado en el kilómetro 16,5 de la vía a Daule, norte de Guayaquil, se escucharon detonaciones.

De a poco, allegados de los internos arribaron a la Peni. La incertidumbre por conocer sobre el estado de sus familiares los desesperaba.

A las 14:33, el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad (SNAI), en Twitter, informó que ante la alerta “se activaron los protocolos correspondientes”.

Minutos antes, un helicóptero policial sobrevoló el complejo carcelario, mientras agentes resguardaban al ingreso principal.

Las familias, al ver este panorama, se exaltaron e intentaron bloquear la vía principal, pero rápidamente fueron retiradas por los agentes policiales hacia un costado del acceso.

“Aquí nos vamos a mantener”, dijeron. Los ánimos se calmaron hasta las 16:23. En ese momento se escuchó una explosión. Otra vez se desataron los gritos. Algunas mujeres rompieron en llanto ante la impotencia por la falta de información. Pensaban lo peor.

Los familiares intentaron obstaculizar la vía a Daule, pero fueron retirados por agentes.Miguel Párraga / EXTRA

“Desde ayer (martes) se rumoraba que se iban a meter en los pabellones, por esas muertes que hubo en la cárcel de Latacunga”, contó entre lágrimas la madre de un PPL.

Según su relato, la mañana de este miércoles las cosas se pusieron tensas en la Peni, principalmente, mencionó, en los pabellones 8 y 9. Sin embargo, el SNAI, en sus publicaciones, no precisó en qué bloques específicamente se produjeron los incidentes.

“No sé nada de mi hijo”, refirió la devastada madre. Su descendiente está recluido en el pabellón 2.

Una hora después, a las 17:23, otra detonación causó pánico. Era el segundo estallido de la tarde que incrementó la tensión con el ingreso y salida de ambulancias, además de patrullas policiales y una unidad del Grupo de Intervención y Rescate (GIR).

A las 17:43, el SNAI, en otra publicación, indicó que, hasta ese momento, seis privados de libertad y cuatro policías resultaron heridos a causa de los incidentes. En el último reporte, la entidad confirmó que los afectados por la reyerta eran 11.

CHONE KILLERS Y AGUILAS LE 'CAYERON AL PABELLÓN 4

Desde el interior de la Penitenciaría del Litoral, una fuente aseguró a EXTRA que los reos de los pabellones 2 y 3, que pertenecen a los Chone Killers y Águilas, en ese orden, se habrían unido para ingresar al bloque 4 y atacar a los privados de libertad.

El informante mencionó que el enfrentamiento habría dejado más de 10 muertos, algunos cuerpos quedaron en el conocido ‘túnel de la muerte’, pero hasta el cierre de esta segunda edición, ninguna autoridad del SNAI o de la Policía Nacional confirmó o desmintió dicha información.

Pasadas las 20:30, más de 500 uniformados de unidades tácticas de la Policía (GIR, GOE y UMO) se encontraban en el interior del centro intentando tomar el control del recinto, mientras que un vehículo de Medicina Legal, utilizado para el levantamiento y traslado de cadáveres, aguardaba afuera de la Peni para ingresar.