En menos de 48 horas a la Policía le ha tocado realizar el levantamiento de tres cadáveres, en diferentes situaciones y lugares del cantón Quinsaloma, parte céntrica de la provincia de Los Ríos.

La noche del viernes 22 de julio fue de terror para los habitantes del recinto Pambilar de Calope. En esta zona limítrofe entre Quevedo, Quinsaloma y la provincia de Cotopaxi, fue hallado un hombre decapitado.

La alerta se dio cerca de las 18:20, cuando el guardia de una hacienda de palmas realizaba su recorrido por la zona. El cuidador narró a los gendarmes que casi le da un ‘patatús’ al ver a un sujeto acuchillado, amarrado de pies y manos, y sin cabeza, la cual estaba a escasos dos metros de donde se halló el cuerpo.

La víctima estaba en pantaloneta y sin camiseta, no tenía identificación, pero en su brazo izquierdo tenía un tatuaje con letras góticas. Los agentes llegaron al sitio y observaron que el fallecido también tenía cortes de arma blanca en su abdomen.

Los familiares del asesinado, que viven en la ciudad de Manta (Manabí), lo reconocieron como Ángel Daniel Cedeño Cantos, quien sería oriundo de suelo manabita. Sus allegados no dieron declaraciones y solo querían llevarse a su pariente para sepultarlo.

Dos ‘fríos’ más

Mientras tanto, la mañana de ayer, en la morgue de Quevedo, se realizaban los trámites para sacar a Patricio Javier Rodríguez Mato, de 29 años, quien fue asesinado el 22 de julio, en Quinsaloma.

La conviviente relató a los agentes que, la tarde del viernes, mientras almorzaban, tocaron la puerta de su casa. Cuando la víctima salió a ver quién era, un sujeto delgado le disparó en el ‘mate’, dejándolo sin vida dentro del inmueble, ubicado en la calle Eduardo Seminario, cerca del centro del cantón.

El ataque se dio frente a la mujer y a sus dos hijos. La señora contó a los investigadores que su esposo tenía problemas con el dueño de un billar de la zona y hace un año este lo había atacado.

De igual manera, cerca del mediodía de ayer, fue reconocido el cadáver de una persona baleada. Tenía un tatuaje que decía 100% Chonero. Se trataría de Jack Isaías Duarte Suárez, de 26 años, su cuerpo fue llevado al cantón La Maná.