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Crónica roja

En los exteriores de una iglesia acribillaron a un sujeto de 33 años.EXTRA

Tres ataques en El Oro dejaron cuatro personas muertas

Sicarios se dieron ‘fiesta’ el fin de semana. A un par de amigos les metieron más de 50 tiros y los dejaron como cedazos.

Cuatro crímenes fue el resultado de la ola de violencia que azotó a tres cantones de El Oro, el fin de semana. El más reciente se dio en la parroquia Puerto Bolívar, en Machala.

La madrugada del 21 de enero, en el barrio Acapulco fueron tiroteados Milton Jahir Pérez Torres, de 19 años, y Hugo Pedro Leones Zamorano, de 22.

Ambos fueron atacados con más de 50 tiros. Agentes de Criminalística y de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) llegaron al sitio para realizar las indagaciones, levantando más de 60 indicios balísticos.

Zamorano registraba 37 orificios de arma de fuego, mientras que a Pérez le contabilizaron 15. Al realizar averiguaciones en el lugar, los moradores indicaron que escucharon detonaciones, pero nada más.

De los dos ‘muñecos’, solo Pérez tenía antecedentes. Él fue detenido en 2021 por un asesinato ligado a las famosas ‘vacunas’ a los pescadores artesanales. Quedó en libertad al ser menor de edad, luego cayó por tráfico ilícito de drogas.

Hostal

Antes de este caso se registró un sicariato en una hostal del cantón Pasaje. Adrián Valentín Armijos Arteaga llegó la noche de este 21 de enero con el fin de visitar a su padre, dueño del lugar.

De pronto, arribó un carro con sujetos armados, entraron al establecimiento y encontraron a la víctima cerca de la puerta.

En ese momento le dispararon directo a la cabeza y se fugaron. En pocos minutos vino personal de la Policía Nacional que confirmó la muerte.

Afuera de una iglesia

Casi a la misma hora de este último hecho, Luis Alberto González Espinoza, de 33 años, fue asesinado al pie de la iglesia del barrio Calderón, en el cantón Santa Rosa.

Él caminaba por la calle Quito cuando dos sujetos en moto lo interceptaron y le dieron cinco tiros, tres de ellos en la cabeza.

Paulo Viteri, jefe de la Dinased de El Oro, dijo que una de las hipótesis es que se trate de un ajuste de cuentas. La víctima había salido hace dos semanas de la cárcel y tenía un amplio historial delictivo: por droga, armas y robo.