La vuelta les salió chueca a un par de gatilleros en Esmeraldas. Dos sicarios se disponían a asesinar a un ciudadano que se encontraba merendando en un restaurante cuando uno de ellos disparó accidentalmente a su compañero de fechorías. 

Esto ocurrió a eso de las 20:00 de este miércoles 24 de agosto en el sector Villas del Seguro, atrás de la Catedral Cristo Rey, en el norte de la capital provincial.

Según testigos, los dos sujetos llegaron al sitio a bordo de un carro y avanzaron a pie hasta el restaurante donde se encontraba el objetivo. Luego entraron al sitio, los dos desenfundaron sus armas de fuego, uno de ellos disparó y el tiro le dio en la mano a la víctima, pero cuando el otro gatillero intentó disparar, su compañero se le atravesó y lo hirió a la altura de las costillas.

En vista de aquello, los sicarios abortaron la misión y huyeron del lugar en una moto que los estaba esperando a una cuadra. “Así herido alcanzó a subirse en la moto y huyó”, contó un testigo del insólito hecho.

Pero el criminal que estaba herido cayó de la moto unos metros más adelante, a la altura del barrio Tripa de Pollo, sus compañeros lo dejaron abandonado, fue detenido por la policía y después trasladado a un hospital cercano donde guarda reposo con vigilancia policial.

En el piso quedó botada una de las armas con la que intentaban asesinar al ciudadano que comía en el restaurante, quien milagrosamente se salvó de morir y solo terminó con una herida en la mano.