Un testigo fue clave para que los investigadores localizaran a David Alejandro Mesías Argüello, apodado la Paca, pues fue él quien habría dado ‘santo y seña’ de los lugares en los que podía haberse escondido, luego del presunto ataque cometido en contra de Santa Alexandra Barre Santana, quien murió a causa de un corte en la yugular con un pico de botella.

El hecho violento se registró a las 03:00 del sábado 10 de diciembre de 2022 en la avenida José María Alemán, popularmente conocida como calle J, en Solanda, sur de Quito. El deceso fue producto de una riña que empezó luego de que dos grupos de libadores, con altercados previos, se encontraran, según informó el jefe policial del distrito Eloy Alfaro, mayor Freddy Borja.

Mesías Argüello fue encontrado en la casa de sus padres, también en Solanda, cerca de las 06:30 de ese día. Al ver la presencia de los uniformados buscó la forma de escapar e incluso corrió hasta el segundo piso de un inmueble, pero su desesperación lo habría llevado a perder el equilibrio y, en consecuencia, cayó hacia un cuarto.

Para su fortuna, no sufrió lesiones. Sin embargo, fue detenido y trasladado a la Unidad Judicial de Flagrancia, de Quitumbe, sitio en el que a las 22:30 se instaló una audiencia de formulación de cargos en su contra. En la diligencia se determinó que la Paca tendría responsabilidad en un posible delito de homicidio, sancionado con prisión de diez a trece años, de acuerdo al artículo 144 del Código Orgánico Integral Penal (COIP).

Durante la diligencia, el sospechoso se acogió al derecho al silencio, mientras que las versiones y denuncias de testigos fueron consideradas para su vinculación al caso, además de las prendas de vestir -como chompas- y una toalla que tenían manchas de sangre. Estos objetos serían sometidos a análisis para sustentar que el individuo las habría utilizado, debido a que, al momento de la aprehensión, se había cambiado de ropa. Esto también lo mencionó el mayor Borja.

En el acta de la audiencia se precisa que la etapa de instrucción, tiempo con el que cuenta la Fiscalía para investigar, tendría una duración de 30 días. Durante este tiempo, la Paca debe permanecer con prisión preventiva para garantizar su presencia en el juicio, sobre todo porque ya intentó huir.