El huecote que dos jóvenes ocasionaron luego de impactarse contra un muro evidenciaba que el golpe había sido fuerte, pero ¿por qué terminaron ‘estampados’ contra la pared? Los autores del orificio presuntamente escapaban tras cometer un asalto a bordo de una motocicleta y fueron embestidos por una víctima, quien se movilizaba en un automóvil Hyundai, de color blanco, aproximadamente a las 07:00 del miércoles 6 de julio de 2022.

El conductor huyó de inmediato, mientras que los sospechosos quedaron entre los escombros junto a su ligero vehículo. Uno de ellos, incluso, atravesó el cemento y terminó en la parte interior de un terreno utilizado como parqueadero, en la intersección de las calles 11 y Sedalana, cerca del barrio Cristo del Consuelo, en el suroeste de Guayaquil.

El hombre que a simple vista parecía más afectado, por los pedazos de bloque que estaban sobre su cuerpo, sobrevivió y fue llevado de urgencia al hospital Abel Gilbert Pontón, del suburbio porteño, mientras que el otro individuo, identificado como William Alberto Chóez Cedillo, de 21 años, falleció en el parterre.

El capitán Milton Erazo, de la Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM), detalló que a la llegada de los primeros equipos de emergencia el joven aún tenía signos vitales, pero no resistió hasta el arribo de los paramédicos del Cuerpo de Bomberos.

Además, mencionó que de acuerdo a la información proporcionada por los lugareños, los motorizados supuestamente escapaban de cometer un robo, en un sector cercano, y se movilizaban a exceso de velocidad por la calle 11.

Ese detalle también fue señalado por un morador, quien añadió que en el trayecto de la huida, la víctima del robo intentó algunas veces tocar la moto con su automóvil, para hacer que se detengan. Sin embargo, los sospechosos lograban evadir el impacto, pero no tuvieron escapatoria al llegar a la intersección con la calle Sedalana, porque en ese lugar existe un corte en la vía que obliga girar a izquierda o derecha.

Fue así que, al bajar la velocidad fueron golpeados por el perjudicado del asalto, quien no habría bajado la velocidad para chocarlos. En consecuencia, salieron proyectados cerca de cinco metros, en el aire, incluyendo la moto, y solo fueron ‘frenados’ por el muro que tumbaron.

Esto fue corroborado por el capitán Erazo, quien acotó que -por ese motivo- pidió apoyo para que al sitio acudieran agentes de la Policía Nacional. El oficial de la ATM acotó que a su llegada no encontraron algún indicio de robo o armas en la escena.

Ronny Castañeda, agente de la Oficina de Investigación de Accidentes de Tránsito (OIAT), explicó que para precisar quién conducía la motocicleta se realizarían pericias, pues los testigos no aportaron con información que permitiera esclarecer esa situación.

También mencionó que se contaba con información del vehículo en el que se movilizaba la víctima del asalto, porque la placa del automotor quedó incrustada en la moto de los sospechosos.

Familiares

Al sitio del suceso llegaron parientes del fallecido, quienes lloraban por lo ocurrido. Ellos prefirieron no hablar y se retiraron tras el levantamiento del cadáver. Ellos, de lo que se pudo escuchar, también tenían el detalle de la placa del vehículo que embistió a los motorizados.