Cuando el caudal del conocido ‘canal de la muerte’ disminuye, hay quienes buscan su desembocadura para realizar faenas de pesca. Esto es en un riachuelo cercano al sector Casas Viejas, en las afueras de Guayaquil, por el kilómetro 19 de la vía a la costa.

Esta actividad se ha vuelto una costumbre en el sector, al igual que el hallazgo de cadáveres, mencionó Fidel Villao, un habitante del sector que por las mañanas trabaja en unos terrenos adyacentes, donde existen plantaciones de maíz.

El hombre recordó que al atardecer del martes 25 de octubre de 2022, un grupo de personas llegaron al lugar para pescar con atarraya, debido a que se volvió fácil cruzar de un lado a otro del afluente, pues habían sido apagadas las bombas que llevan agua hacia el sitio desde la toma de la vía a Daule.

“Eso lo hacen por dos razones: porque van a dar mantenimiento o porque ya saben que hay un muerto”, comentó Villao.

Para el residente, esta vez no habrían sabido de la presencia del cadáver en la zanja, porque los investigadores de la Policía Nacional no aparecieron hasta que una de las personas que estuvieron en el hallazgo se comunicó con ellos. Incluso tardaron en realizar el levantamiento, pues recién pasadas las 21:00 se llevaron el cuerpo rumbo al Laboratorio de Criminalística.

En un informe al que tuvo acceso EXTRA se detalla que el hombre encontrado no estaba identificado y que por su avanzado estado de descomposición no se pudo determinar qué tipo de heridas tenía.

Villao dijo que, al parecer, era una persona de unos 45 años. “Ya acá es costumbre ver muertos, siempre aparecen y los vienen a recoger. No nos asusta y tampoco es novedad”, concluyó. (SCM)